Cogí tus manos, entre las mías,
Acerqué mis labios hacia tu frente,
No se las palabras que me decias,
Lo tapaba el murmullo de aquella
fuente.
Asi estuvimos, ¿Qué se yo cuanto?
Tu bello rostro resplandecia,
La
noche levantaba, su negro
manto,
Sin darnos cuenta que amanecía.
Guardo el recuerdo de aquella noche
Tan larga y corta, quedó en mi mente,
Y no te extrañe que te reproche,
Que no te acuerdes de aquella fuente.
GARMAP.