En mi libro:"Venturas y desventuras del linaje Al-Basri o el andalusi errante"incluyo una historia que se desarrolla en Cuevas de Almanzora en el siglo XVI, tras la conquista de Granada por los Reyes Catolicos y su incumplimiento de las Capitulaciones de Santa Fe donde se garantizaba a los vencidos el ejercicio libre de su religion, lengua, y el derecho de propiedad, cuestion que olvidaron y sometieron a los moriscos a una cruel represion, e incluso a la persecucion y a la muerte contra estas pobres gentes que se vieron en la circunstancias de la rebelion, insumision en el monte.
He aqui una historia que aunque el personaje no fue real pero pudo existir con otros nombres y con su propia historia. He aqui mi relato.
Esta medida creo una multitud de gentes “sin tierra” que de allí, procede el nombre de “monfies” o “desterrados”. Sumidos en la desesperación, se llega a la rebelión de las Alpujarras, en 1568, cuyo escenario es el reino de Granada, desde las Alpujarras almerienses hasta la montaña de la Zagra o la serranía de Ronda. También se produce un levantamiento en los pueblos de la A-Xarquia de las manos de Andrés El Xorairan y que termina con el trágico episodio de Frigiliana.
La historia oficial de los “salteadores o bandoleros” pero pudieron ser héroes sí “el rió hubiese llevado las aguas de otra manera”, al igual que los guerrilleros de la Guerra de la Independencia contra Napoleón o cómo hoy, aquellos patriotas que luchan en Palestina, Afganistán o Irak contra la injusta invasión extranjera.
Entre este grupo, aparece el personaje, Omar El Bermejo, monfi, quien con una partida de insumisos, ejercen sus acciones en la serranía de Ronda, siendo para el colectivo de represaliados y oprimidos, héroes de leyenda y para otros, sus represores, bandidos fuera de la ley y Nawal Al-Basri, hombre honesto, temeroso de Dios y cuyas circunstancias personales se había inclinado a tomar esta senda en defensa de los desterrados y oprimidos por las leyes injustas de las “sátrapas” que ejercían el poder político. Había tomado el seudónimo de Omar” el Bermejo en recuerdo de aquel héroe legendario, rebelde, e insumiso contra el Califa Abd-el-Rahman III de Córdoba, desde su fortaleza de Bobastro (Málaga) y el apellido de “Bermejo” en referencia al color de su cabello
Su familia se había trasladado a Fez, para evitar represalias
contra ésta, puesto que él era un personaje conocido por los Corregidores y otras autoridades locales en las villas de la Serranía de Ronda, donde era un ídolo adorado por las gentes humildes, especialmente la morisca, entre las que repartía los botines que se les distraía en sus hábiles acciones a quienes les habían arrebatado sus tierras.
La partida que dirigía esta formada por una serie personajes, que generalmente habían soportando sobre su persona, la cruel represión de que eran objeto los moriscos, tras la conquista cristiana, como conversiones al cristianismo a la fuerza, perdida de sus propiedades, destierros etc,. Éstos eran, Mohamed El Kahayat, su lugarteniente, antiguo colaborador como auxiliar del “almotacén” de la Medina granadina; Samir Abel Yabri, militar de la guardia del Sultan; Gibran Motar, antiguo alguacil de la Medina granadina; Ibrahim Kabbani, persona ilustrada, alfaqui, perseguido por su oposición a las conversiones obligadas; Ahmed Bennis, comerciante, antiguo funcionario de la “Alcaicería” granadina y una mujer, Hanan Kasir, quien se ocupaba del avituallamiento de víveres y la preparación de comidas en una cueva, donde se alojaban, en la sierra de Grazalema, lugar próximo a Ubrique y su actuación principal era la serranía de Ronda, aunque a veces se desplazaban temporalmente por todo el antiguo territorio del reino nazarí, entre las Alpujarras almerienses hasta la sierra de las Nieves y la de Grazalema malagueña. La partida durante el período que actuó, durante siete años, comprendido entre 1493 hasta 1500, jamás fue responsable de delitos de sangre y cometían cierto robos contra personas de influencia política y con la finalidad de reparar injusticias, contra el colectivo de moriscos, tras su desesperada situación social en la que se encontraban, después de la conquista de Granada. A continuación relatamos, alguna de estas historias.
Omar El Bermejo, fue informado que en Cuevas de Almanzora, la Marquesa de Velez, Dª María de Carvajal y Osorio, mujer extremadamente religiosa, pero asistida de un sectarismo irracional, había tomado la decisión de expulsar de su Señorío, a un colectivo numeroso de moriscos, que no querían renunciar a sus creencias religiosas islámicas y en despecho había tomado esta acción.
La partida de Omar, se puso en marcha para el lugar y planeó con estrategia de presentarse ante la estancia de la noble dama y cuando estaba en su presencia la preguntó- ¡Dígame, Sra Marquesa, soy Omar El Bermejo! ¿Tendría la
amabilidad de conversar brevemente conmigo, Excelentisima Sra? Si, acepto la dama. ¿He sido informado, que Su Señoría ha tomado la decisión de expulsar de sus tierras, a todos mis hermanos de raza y de creencias religiosas, por el único motivo, de no renunciar a sus tradiciones? ¡Si es cierto! respondió la dama. Comenta, Omar ¡Hace más de 800 años, mi pueblo vino a Al-Andalus y de acuerdo con las predicaciones del Profeta, respetó vidas, haciendas, y el derecho al culto religioso etc., y hemos mantenido esta norma siempre desde siglos! ¿Porque ahora, los cristianos, no cumplen, con esta norma, con nosotros? preguntó a la dama- Ella le contestó, ¡Cristo es el Hijo de Dios y en cambio, sus símbolos religiosos son falsos! Entonces replico, Omar ¡Cristo es también nuestro amado Profeta, que en nuestro Libro Sagrado “Alcorán” anunció también, la venida también de nuestro Profeta Mohamed!, Omar no pudo convencer la tozudez de la dama, pues su proselitismo religioso, no admitía ninguna otra creencia religiosa que no fuese la cristiana así que se limitó a dar ordenes a su gente para que sustrajeran, monedas, objetos de valor y otros enseres, que posteriormente tras su huida, fueron distribuidos entre la población morisca represaliada con actitud de la marquesa.
Fdo: Julio Reyes Rubio "Al-Mayriti"
He aqui una historia que aunque el personaje no fue real pero pudo existir con otros nombres y con su propia historia. He aqui mi relato.
Esta medida creo una multitud de gentes “sin tierra” que de allí, procede el nombre de “monfies” o “desterrados”. Sumidos en la desesperación, se llega a la rebelión de las Alpujarras, en 1568, cuyo escenario es el reino de Granada, desde las Alpujarras almerienses hasta la montaña de la Zagra o la serranía de Ronda. También se produce un levantamiento en los pueblos de la A-Xarquia de las manos de Andrés El Xorairan y que termina con el trágico episodio de Frigiliana.
La historia oficial de los “salteadores o bandoleros” pero pudieron ser héroes sí “el rió hubiese llevado las aguas de otra manera”, al igual que los guerrilleros de la Guerra de la Independencia contra Napoleón o cómo hoy, aquellos patriotas que luchan en Palestina, Afganistán o Irak contra la injusta invasión extranjera.
Entre este grupo, aparece el personaje, Omar El Bermejo, monfi, quien con una partida de insumisos, ejercen sus acciones en la serranía de Ronda, siendo para el colectivo de represaliados y oprimidos, héroes de leyenda y para otros, sus represores, bandidos fuera de la ley y Nawal Al-Basri, hombre honesto, temeroso de Dios y cuyas circunstancias personales se había inclinado a tomar esta senda en defensa de los desterrados y oprimidos por las leyes injustas de las “sátrapas” que ejercían el poder político. Había tomado el seudónimo de Omar” el Bermejo en recuerdo de aquel héroe legendario, rebelde, e insumiso contra el Califa Abd-el-Rahman III de Córdoba, desde su fortaleza de Bobastro (Málaga) y el apellido de “Bermejo” en referencia al color de su cabello
Su familia se había trasladado a Fez, para evitar represalias
contra ésta, puesto que él era un personaje conocido por los Corregidores y otras autoridades locales en las villas de la Serranía de Ronda, donde era un ídolo adorado por las gentes humildes, especialmente la morisca, entre las que repartía los botines que se les distraía en sus hábiles acciones a quienes les habían arrebatado sus tierras.
La partida que dirigía esta formada por una serie personajes, que generalmente habían soportando sobre su persona, la cruel represión de que eran objeto los moriscos, tras la conquista cristiana, como conversiones al cristianismo a la fuerza, perdida de sus propiedades, destierros etc,. Éstos eran, Mohamed El Kahayat, su lugarteniente, antiguo colaborador como auxiliar del “almotacén” de la Medina granadina; Samir Abel Yabri, militar de la guardia del Sultan; Gibran Motar, antiguo alguacil de la Medina granadina; Ibrahim Kabbani, persona ilustrada, alfaqui, perseguido por su oposición a las conversiones obligadas; Ahmed Bennis, comerciante, antiguo funcionario de la “Alcaicería” granadina y una mujer, Hanan Kasir, quien se ocupaba del avituallamiento de víveres y la preparación de comidas en una cueva, donde se alojaban, en la sierra de Grazalema, lugar próximo a Ubrique y su actuación principal era la serranía de Ronda, aunque a veces se desplazaban temporalmente por todo el antiguo territorio del reino nazarí, entre las Alpujarras almerienses hasta la sierra de las Nieves y la de Grazalema malagueña. La partida durante el período que actuó, durante siete años, comprendido entre 1493 hasta 1500, jamás fue responsable de delitos de sangre y cometían cierto robos contra personas de influencia política y con la finalidad de reparar injusticias, contra el colectivo de moriscos, tras su desesperada situación social en la que se encontraban, después de la conquista de Granada. A continuación relatamos, alguna de estas historias.
Omar El Bermejo, fue informado que en Cuevas de Almanzora, la Marquesa de Velez, Dª María de Carvajal y Osorio, mujer extremadamente religiosa, pero asistida de un sectarismo irracional, había tomado la decisión de expulsar de su Señorío, a un colectivo numeroso de moriscos, que no querían renunciar a sus creencias religiosas islámicas y en despecho había tomado esta acción.
La partida de Omar, se puso en marcha para el lugar y planeó con estrategia de presentarse ante la estancia de la noble dama y cuando estaba en su presencia la preguntó- ¡Dígame, Sra Marquesa, soy Omar El Bermejo! ¿Tendría la
amabilidad de conversar brevemente conmigo, Excelentisima Sra? Si, acepto la dama. ¿He sido informado, que Su Señoría ha tomado la decisión de expulsar de sus tierras, a todos mis hermanos de raza y de creencias religiosas, por el único motivo, de no renunciar a sus tradiciones? ¡Si es cierto! respondió la dama. Comenta, Omar ¡Hace más de 800 años, mi pueblo vino a Al-Andalus y de acuerdo con las predicaciones del Profeta, respetó vidas, haciendas, y el derecho al culto religioso etc., y hemos mantenido esta norma siempre desde siglos! ¿Porque ahora, los cristianos, no cumplen, con esta norma, con nosotros? preguntó a la dama- Ella le contestó, ¡Cristo es el Hijo de Dios y en cambio, sus símbolos religiosos son falsos! Entonces replico, Omar ¡Cristo es también nuestro amado Profeta, que en nuestro Libro Sagrado “Alcorán” anunció también, la venida también de nuestro Profeta Mohamed!, Omar no pudo convencer la tozudez de la dama, pues su proselitismo religioso, no admitía ninguna otra creencia religiosa que no fuese la cristiana así que se limitó a dar ordenes a su gente para que sustrajeran, monedas, objetos de valor y otros enseres, que posteriormente tras su huida, fueron distribuidos entre la población morisca represaliada con actitud de la marquesa.
Fdo: Julio Reyes Rubio "Al-Mayriti"