Que hermosa eres Madre de la Piedad, tu con tu mirada celestial alivias las penas de todo el que acude a ti y reconfortas el corazón afligido con solamente fijar nuestra mirada en tus ojos azules,
reflejo del
manto que enbellece tu imajgen vestida de gala para tus
fiestas de agosto. Quien al mirar tu imagen no se para un instante a contemplar tu belleza,
Virgen siencilla humilde de Nazaret, que quisiste quedarte como patrona y protectora del pequeño
pueblo de
Benecid, protegenos siempre con tu manto
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