Seguramente ya estaran las chumberas que quedan, con todo su explendor y en
colorido verde amarillento,
esperando se extriados, cogidos, barridos, pelados y depositados dentro de la nevera y cuando estan
bien fresquitos; saborearlos con ese sabor tan original, dulzón y rico rico.
Y muy cerca esa la higuera, haciéndole la competencia con los higos pajareros, faciles de coger y sencillamente
comerlos y volar la imaginación por el pasado, vivirlo con ilusión en el presente y luchar para que el
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