Aquellos viajes de fin de semana de tan solo un día y sin embargo cuanto gozábamos los críos y crías, sin tantos abalorios, el jolgorio, sin tomar una sola gota de alcohol estaba dentro de nosotros, saben UDS. la gran mayoría de los que esos viajes hicimos, leíamos, hoy todo el basamento se reduce a la posesión material, al hedonismo sin ton ni son. A no tener ideas propias, solo son peleles de los especuladores avispaos, cuando el negocio que más beneficios da son los lugares de un ocio prefabricado, nada nuevo se puede esperar, cuando estamos en minoría los que aprendimos de Sócrates a través de Platón. Nos quedan los técnicos, pero sin humanismo la sociedad sin más remedio o cambia o el fracaso asegurado está. En fin, he pasado muchas veces por la estación, pero no tengo el gusto de conocer la población, la aldea, que estando tan cerca de Terreros supongo que es una prolongación. Tengo primos a los que quiero mucho que tienen en Terreros su lugar de esparcimiento. Saludos a los 100 habitantes del pueblo. Y, escriban, por favor, cuesta poco y es muy sano