José Ramón, he vuelto a leer tu mensaje del 15/04/09. Cuando tus padres emigraron en 1928, mi madre tenía 16 años, esta nacida en Fernán Pérez, y estoy seguro que llegó a conocer a tus padres pues mi madre hablaba mucho de haber estado en el cortijo de Bornos como en su momento expliqué al (baile de las carreras) y mi abuelo que tenía tierras iba a moler el trigo y el panizo a un molino que allí había; en aquella época aquella zona no estaba muy poblada y se conocían todos, por lo tanto estoy seguro que se conocieron. Nombras a tu tío Manuel Frenando yo no lo recuerdo pero su nombre está en mi memoria de haberlo sentido en casa, en cambio si me acuerdo de Paco (el chumino) y del que mas es de Antonio Cruz, de su mujer y de sus hijas; luego te explicaré una pequeña historia de Antonio Cruz.
Antes de la guerra mi abuelo materno emigró a Argentina, vino dos veces a España y después de la contienda mandó moneda argentina para pagar los pasajes de la familia y se llevó a mi abuela y mis cinco tíos excepto a mi madre que ya estaba casada (cosas de la vida); recuerdo a mi madre llorando, cuando contaba como había ido a Algeciras a despedir en el barco a su madre y a sus hermanos y diciendo que nunca mas los volvería a ver y así fue. Siendo yo niño había una canción que se oía mucho que decía; Golondrina golondrina, tu que vas cruzando el mar, dale un abrazo a mi madre que allá en la Argentina está, y si tu la ves que llora, tu la debes consolar, dile que aquí en nuestra España, nunca la podré olvidar. Todo el rato que duraba la canción, mi madre lloraba, yo en mi inocencia de niño, le preguntaba ¿Por qué lloras? Y ella me lo explicaba. Toda mi familia está en Santiago del Estero, Campo Gallo y Buenos Aires.
Pequeña historia. La cuento porque se que mi tía ya fallecida, no me lo reprocharía. Antes de estallar la guerra, Antonio Cruz y mi tía Dolores Montoya vivían en Fernán Pérez y eran novios ambos muy jóvenes. Aquella noche se despedían pues a Antonio al día siguiente se lo llevaban al frente (guerra), contaba mi tía que aquel hombre al que tanto quiso toda su vida y luego no se casó con el, le pidió aquella noche, mil veces que le diera un beso de despedida diciéndole que igual lo mataban en el frente y no lo volvería a ver, en aquella época y en un pequeño pueblo aquello era (pecado mortal) mi tía no se lo dio y contaba que cuando el se marchó y se perdió en la esquina de la casa, llorando lo llamó para besarlo pero el no sintió la llamada; tiempo después de acabada la contienda llegó Antonio a Fernán Pérez, mi tía tenía novio se casó y mi abuelo se los llevó a Argentina y después de dieciséis años volvieron a España y estando en Rodalquilar se vieron y se saludaron con mucha alegría.
Aunque el marido de mi tía vive, ya muy mayor, tengo que decirlo porque el lo sabe; mi tía estuvo arrepentida toda su vida de haberse casado con el, pues no le dio buena vida, y no haberlo hecho con el amor de su vida, Antonio Cruz.
Desde España para todos los emigrantes españoles y sus descendientes y en especial a mi familia y José Ramón
Un muy fuerte abrazo.
Antes de la guerra mi abuelo materno emigró a Argentina, vino dos veces a España y después de la contienda mandó moneda argentina para pagar los pasajes de la familia y se llevó a mi abuela y mis cinco tíos excepto a mi madre que ya estaba casada (cosas de la vida); recuerdo a mi madre llorando, cuando contaba como había ido a Algeciras a despedir en el barco a su madre y a sus hermanos y diciendo que nunca mas los volvería a ver y así fue. Siendo yo niño había una canción que se oía mucho que decía; Golondrina golondrina, tu que vas cruzando el mar, dale un abrazo a mi madre que allá en la Argentina está, y si tu la ves que llora, tu la debes consolar, dile que aquí en nuestra España, nunca la podré olvidar. Todo el rato que duraba la canción, mi madre lloraba, yo en mi inocencia de niño, le preguntaba ¿Por qué lloras? Y ella me lo explicaba. Toda mi familia está en Santiago del Estero, Campo Gallo y Buenos Aires.
Pequeña historia. La cuento porque se que mi tía ya fallecida, no me lo reprocharía. Antes de estallar la guerra, Antonio Cruz y mi tía Dolores Montoya vivían en Fernán Pérez y eran novios ambos muy jóvenes. Aquella noche se despedían pues a Antonio al día siguiente se lo llevaban al frente (guerra), contaba mi tía que aquel hombre al que tanto quiso toda su vida y luego no se casó con el, le pidió aquella noche, mil veces que le diera un beso de despedida diciéndole que igual lo mataban en el frente y no lo volvería a ver, en aquella época y en un pequeño pueblo aquello era (pecado mortal) mi tía no se lo dio y contaba que cuando el se marchó y se perdió en la esquina de la casa, llorando lo llamó para besarlo pero el no sintió la llamada; tiempo después de acabada la contienda llegó Antonio a Fernán Pérez, mi tía tenía novio se casó y mi abuelo se los llevó a Argentina y después de dieciséis años volvieron a España y estando en Rodalquilar se vieron y se saludaron con mucha alegría.
Aunque el marido de mi tía vive, ya muy mayor, tengo que decirlo porque el lo sabe; mi tía estuvo arrepentida toda su vida de haberse casado con el, pues no le dio buena vida, y no haberlo hecho con el amor de su vida, Antonio Cruz.
Desde España para todos los emigrantes españoles y sus descendientes y en especial a mi familia y José Ramón
Un muy fuerte abrazo.
