Don Leocadio el compañero se nos a marchado de visita a nuestro PARAISO me lo imagino bajando con el coche por la cuesta que hay antes de llegar a Las Hortichuelas que antes era la famosa Cuesta Ortiz; bajando con la ilusión de entrar en ese pequeño pero bonito valle, en ese momento al menos a mí me vienen a mi memoria en pocos segundos tantos recuerdos, padres, amigos, juegos, colegio etc. etc. y cuando giro la cabeza a la derecha y veo a lo lejos el cerro El Cinto nunca he podido contener las lágrimas mi mujer calla y me pasa la mano por la nuca, me entiende sin tener que hablar. Don Leocadio para memoria la sulla, pues acordarse después de cincuenta y ocho ó sesenta años del practicante Amor, Don Ignacio Don Ramón de Rotaeche hay que tener muy fresca la memoria, un secretillo, el otro ingeniero era Don Juan Calos López Angulo luego vino otro, un tal Don Fidel no recuerdo sus apellidos, aparte también habían tres ó cuatro péritos de minas, en fin lo clásico en esta España nuestra cinco mandan y uno trabaja; ahora que recuerdo no se si cuando Vd. estaba ya había el médico solo para los mineros visitaba una vez a la semana a estos y tenía unos rayos x para como decíamos en aquellos tiempos pasarlos por la pantalla, y el practicante que tenia vivía al lado de la consulta se llamaba Montellano, un señor de unos dos metros muy delgado y con gafas de culo de vaso, la visita era por la zona donde estaban los barracones de los mineros que no vivían en el pueblo, y el médico que los visitaba en Almería era Don Ángel Maresca éste era el que les daba el grado 1-2 ó 3 de silicosis. Mis padres Vivian bajando del bar. el Pintao a unos cien metros la calle hace un poco de curva a la izquierda pues en la misma curva enfrente está la primera casa que da a la rambla y vivía un tal Arturo con su mujer Juana y un niño adoptado a Arturo no le conocí yo era muy pequeño, murió de silicosis estando Vd. allí entre el cincuenta y cincuenta y cinco; y ahora tratarémos de engordar este foro. Niñas y niños de RODAQUILAR hoy ya hombres y mujeres! escrivid vuestros recuerdos ¡que no queden olvidados ¿quién no iba a buscar espárragos, coyo, ó en las noches de verano salía a jugar, niños y niñas juntos al escondite, ó cantar aquella canción que decía ¿de quien es ese ruidito que anda por ahí, de noche y de dia no deja dormir? Pués somos los ladrones que venimos a robar; Mariquita no está en casa que está en el jardin cortando las flores de Marzo y de Abril etc etc. Por favor escribid os aseguro que daréis mucha alegria a aquellos que fuimos niños y que nos gustaría tener ahún aquella bonita inocencia.
Un beso y un abrazo para todos.
Un beso y un abrazo para todos.