María, si se toma usted el trabajo de volver a leer mi mensaje, verá que en ningún momento afirmo que el hecho referido haya sido verdad. Solamente, en plan de recuerdo, quise compartir con el foro esta anécdota, que cuando niño escuché narrar muchas veces. Nunca fue mi voluntad ofender o agraviar a alguien, y si así lo he hecho involuntariamente con usted, reciba mis disculpas.