EL CRIMEN DE NÍJAR
PARTE I
LA HISTORIA (CONTINUACIÓN)
Más noticias del Diario de Almería: “ Crimen misterioso. Cuando va a casarse desaparece la novia y es encontrada junto al cadáver del hombre con quien se fue
En un cortijo del término municipal de Níjar, se disponían en la pasada noche del día 22 del actual a desarrollar los preparativos para el enlace matrimonial de una hija del cortijero de 20 años de edad con un labrador con el que sostenía relaciones desde hace algún tiempo. Habíase fijado la hora de las tres de la madrugada para efectuar la ceremonia religiosa. Como es fácil colegir, el novio se encontraba en la casa de su prometida desde las primeras horas de la noche. Poco más tarde empezaron a llegar al cortijo en distintas caballerías numerosos invitados. Serían aproximadamente las diez y media de la noche, la novia entregó a su futuro esposo una manta, diciéndole que entrara en una habitación contigua y se acostara, con objeto de que descansara, pues ella la llamaría con la anticipación necesaria. Accedió el novio, retirándose a descansar. A medida que avanzaba la hora, llegaban mayor número de invitados, los cuales eran atendidos por los familiares de la novia, quienes después se ocuparon en ultimar los preparativos consiguientes. Transcurrió algún tiempo y como las personas invitadas y las de la casa, no vieran por parte alguna a la novia, preguntaron por ella y tras de buscarla por todas partes, ya próximo a las doce de la noche, se dieron cuenta de que había desaparecido. En vista de ello, los invitados, contrariados por tal acontecimiento, para ellos inesperado, decidieron marcharse y poco a poco así lo efectuaron. Uno de los invitados encuentra en el camino el cadáver de un hombre que resultó ser su hermano. Uno de los invitados que se retiraron al igual que los demás, en vista de lo sucedido con la desaparición de la novia, al llegar a una distancia de 6 u 8 kilómetros de la casa cortijo, encontró bañado en sangre el cadáver de un hombre.
La impresión que recibió fue grande, pero ella aumentó cuando advirtió que el cadáver era su hermano. Este se apellida Montes Cañadas y cuenta 34 años de edad, siendo primo hermano de la que iba a contraer matrimonio y que se ignoraba su paradero. El momento de dolor que el citado individuo sufrió al reconocer el cadáver de su hermano, fue intensísimo dando gritos demandando auxilio. Al lugar del suceso acudieron varias personas de las invitadas que pasaban por aquellos contornos con ánimo de marchar a sus respectivos domicilios. Estas dieron aviso a la Benemérita, y en el momento que se personaba dicha fuerza, también apareció la novia, que por lo visto se encontraba escondida próxima al cadáver. Ella aparecía con las ropas desgarradas y con lesiones, señales evidentes de que hubo de sostener con alguien una violenta lucha. Uno de los pendientes de la citada joven, fue hallado junto al cadáver de su primo. La Benemérita la detuvo, e interrogada, manifestó, que estando en su domicilio acordó con su primo la fuga, para lo cual al retirarse su novio a descansar, montaron en la caballería que su primo llevase al cortijo y emprendieron la fuga sin ser vistos por persona alguna de las invitadas. Al llegar al lugar donde se encontraba el cadáver, dice la novia, nos salió al encuentro un enmascarado, quien disparó repetidas veces contra el primo raptor, recibiendo éste cuatro balazos en la cabeza y pecho mortales de necesidad. Poco después se personó el Juzgado quién dispuso el levantamiento del cadáver y precia autorización se concedió a la familia el que se lo llevaran a su domicilio para velarle. Después fue detenido el novio el cual niega toda participación en este hecho. A pesar de ello, y de que los invitados afirman que no le vieron salir de la habitación donde entrara a descansar por indicación de la que iba a ser su esposa, ha sido encarcelado en vista, sin duda, de la confusión que envuelve a este extraño suceso. La novia manifiesta que, en efecto, se fugaba con su primo, pero que no pudo reconocer al agresor de él porque éste se dio a la fuga, amparado por la oscuridad de la noche, una vez que cometió su crimen. La caballería propiedad del muerto, en donde montara con su prima, fue encontrada después en la casa cortijo donde la novia habita, cosa muy particular, ya que ello demuestra que el autor del asesinato debió llevarla allí, pues de no pasar así, lo más racional es que la bestia se hubiera dirigido a casa de su dueño, impulsada por sus naturales instintos. Por todo lo cual, el crimen aparece rodeado de un gran misterio, teniendo consternado al vecindario. En todas partes se comenta el crimen sucedido, haciéndose a su alrededor, infinidad de conjeturas. Es de esperar que pronto desaparezca el misterio que rodea este suceso y se conozca al autor o autores de la tragedia. A medida que obtengamos noticias las daremos a conocer a nuestros lectores.”
Diario de Almería día 25 de julio de 1928: “El misterioso crimen de Níjar. Las veleidades de una mujer, provocan el desarrollo de una sangrienta tragedia en la que cuesta la vida a un hombre. Ampliamos la información publicada en nuestro número de ayer, acerca del asesinato cometido en término de Níjar. Como durante el día de ayer no se recibieron noticias oficiales de este suceso, marcharon en automóvil a Níjar nuestro compañero de redacción, señor Salazar y el corresponsal y colaborador en este periódico señor Plaza Martínez, con objeto de adquirir una amplia y detallada información de este drama pasional que tanto interés ha despertado entre nuestros lectores, y en el público en general por las circunstancias especiales que en el mismo concurren y la forma casi folletinesca en que se ha desarrollado. En Níjar: Después de 45 minutos de viaje, estamos en el pueblo de Níjar, dirigiéndonos seguidamente al domicilio de nuestro corresponsal en aquella población, Don Ramón Jiménez quien nos recibió con la amabilidad que lo caracteriza, poniéndose a nuestra disposición para adquirir los mayores datos posibles, haciendo nuestra labor más fructífera. El señor Jiménez nos presentó al alcalde, con quien hablamos durante breves momentos. Al interrogarle acerca del crimen cometido en aquel término, nos manifestó que le había impresionado tanto, que no le era agradable hablar de él, hasta el punto que no había querido preguntar nada que se relacionase con él. Despidiéndonos de la primera autoridad municipal, para empezar nuestra labor de información. Comentando el crimen: Al entrar en la Plaza de la Constitución observamos varios corrillos de personas que se hallaban estacionadas frente al Ayuntamiento, las cuales comentaban silenciosamente el asesinato, motivo de consternación de aquellos vecinos y comidilla del día, como vulgarmente se dice, en todas las tertulias y reuniones. Dichos individuos se encontraban frente a las oficinas que son ocupadas por el Juzgado municipal en la Casa Consistorial. En ellas, hallábase el juez de instrucción del Juzgado de Sorbas, don Ambrosio López Jiménez, con el secretario don Juan Beltrán, tomando declaración a las personas que han sido detenidas. Cómo se desarrolló el drama desde los primeros momentos: En el cortijo denominado El Fraile, propiedad de don Antonio Acosta, del término municipal de Níjar, habita un anciano, cultivador de dicha finca. En unión de éste vive su hija Francisca Cañadas Morales, de 20 años de edad, la que desde hace dos años mantenía relaciones amorosas con Casimiro Pérez Pino, de 29 años de edad, jornalero y que reside accidentalmente en el cortijo llamado del Jabonero, distante 4 kilómetros aproximadamente al de su novia. Esta había sido dotada por sus familiares, legándole 15.000 pesetas. Como durante el transcurso de los 2 años de relaciones no habían tenido la más insignificante discrepancia, acordaron contraer matrimonio. La ceremonia religiosa había sido fijada para el día 23 del actual, a las tres de la madrugada, en la iglesia de la barriada de Fernán Pérez. La noche trágica: Por la tarde del día 22 llegó a la casa cortijo de su prometida, Casimiro Pérez, y desde entonces, la familia de la novia comenzó a dar efectividad a los preparativos necesarios, para que, antes de la llegada de los numerosos invitados que habrían de asistir a la boda, estuviese todo dispuesto para solemnizar el acto. Para ello, sacrificaron dos corderos, teniendo además preparados gran cantidad de licores y dulces. Como es lógico, el sacerdote de la iglesia donde el enlace se proyectaba efectuar había sido de antemano y con la anticipación oportuna, avisado al efecto.
(CONTINUARÁ)
PARTE I
LA HISTORIA (CONTINUACIÓN)
Más noticias del Diario de Almería: “ Crimen misterioso. Cuando va a casarse desaparece la novia y es encontrada junto al cadáver del hombre con quien se fue
En un cortijo del término municipal de Níjar, se disponían en la pasada noche del día 22 del actual a desarrollar los preparativos para el enlace matrimonial de una hija del cortijero de 20 años de edad con un labrador con el que sostenía relaciones desde hace algún tiempo. Habíase fijado la hora de las tres de la madrugada para efectuar la ceremonia religiosa. Como es fácil colegir, el novio se encontraba en la casa de su prometida desde las primeras horas de la noche. Poco más tarde empezaron a llegar al cortijo en distintas caballerías numerosos invitados. Serían aproximadamente las diez y media de la noche, la novia entregó a su futuro esposo una manta, diciéndole que entrara en una habitación contigua y se acostara, con objeto de que descansara, pues ella la llamaría con la anticipación necesaria. Accedió el novio, retirándose a descansar. A medida que avanzaba la hora, llegaban mayor número de invitados, los cuales eran atendidos por los familiares de la novia, quienes después se ocuparon en ultimar los preparativos consiguientes. Transcurrió algún tiempo y como las personas invitadas y las de la casa, no vieran por parte alguna a la novia, preguntaron por ella y tras de buscarla por todas partes, ya próximo a las doce de la noche, se dieron cuenta de que había desaparecido. En vista de ello, los invitados, contrariados por tal acontecimiento, para ellos inesperado, decidieron marcharse y poco a poco así lo efectuaron. Uno de los invitados encuentra en el camino el cadáver de un hombre que resultó ser su hermano. Uno de los invitados que se retiraron al igual que los demás, en vista de lo sucedido con la desaparición de la novia, al llegar a una distancia de 6 u 8 kilómetros de la casa cortijo, encontró bañado en sangre el cadáver de un hombre.
La impresión que recibió fue grande, pero ella aumentó cuando advirtió que el cadáver era su hermano. Este se apellida Montes Cañadas y cuenta 34 años de edad, siendo primo hermano de la que iba a contraer matrimonio y que se ignoraba su paradero. El momento de dolor que el citado individuo sufrió al reconocer el cadáver de su hermano, fue intensísimo dando gritos demandando auxilio. Al lugar del suceso acudieron varias personas de las invitadas que pasaban por aquellos contornos con ánimo de marchar a sus respectivos domicilios. Estas dieron aviso a la Benemérita, y en el momento que se personaba dicha fuerza, también apareció la novia, que por lo visto se encontraba escondida próxima al cadáver. Ella aparecía con las ropas desgarradas y con lesiones, señales evidentes de que hubo de sostener con alguien una violenta lucha. Uno de los pendientes de la citada joven, fue hallado junto al cadáver de su primo. La Benemérita la detuvo, e interrogada, manifestó, que estando en su domicilio acordó con su primo la fuga, para lo cual al retirarse su novio a descansar, montaron en la caballería que su primo llevase al cortijo y emprendieron la fuga sin ser vistos por persona alguna de las invitadas. Al llegar al lugar donde se encontraba el cadáver, dice la novia, nos salió al encuentro un enmascarado, quien disparó repetidas veces contra el primo raptor, recibiendo éste cuatro balazos en la cabeza y pecho mortales de necesidad. Poco después se personó el Juzgado quién dispuso el levantamiento del cadáver y precia autorización se concedió a la familia el que se lo llevaran a su domicilio para velarle. Después fue detenido el novio el cual niega toda participación en este hecho. A pesar de ello, y de que los invitados afirman que no le vieron salir de la habitación donde entrara a descansar por indicación de la que iba a ser su esposa, ha sido encarcelado en vista, sin duda, de la confusión que envuelve a este extraño suceso. La novia manifiesta que, en efecto, se fugaba con su primo, pero que no pudo reconocer al agresor de él porque éste se dio a la fuga, amparado por la oscuridad de la noche, una vez que cometió su crimen. La caballería propiedad del muerto, en donde montara con su prima, fue encontrada después en la casa cortijo donde la novia habita, cosa muy particular, ya que ello demuestra que el autor del asesinato debió llevarla allí, pues de no pasar así, lo más racional es que la bestia se hubiera dirigido a casa de su dueño, impulsada por sus naturales instintos. Por todo lo cual, el crimen aparece rodeado de un gran misterio, teniendo consternado al vecindario. En todas partes se comenta el crimen sucedido, haciéndose a su alrededor, infinidad de conjeturas. Es de esperar que pronto desaparezca el misterio que rodea este suceso y se conozca al autor o autores de la tragedia. A medida que obtengamos noticias las daremos a conocer a nuestros lectores.”
Diario de Almería día 25 de julio de 1928: “El misterioso crimen de Níjar. Las veleidades de una mujer, provocan el desarrollo de una sangrienta tragedia en la que cuesta la vida a un hombre. Ampliamos la información publicada en nuestro número de ayer, acerca del asesinato cometido en término de Níjar. Como durante el día de ayer no se recibieron noticias oficiales de este suceso, marcharon en automóvil a Níjar nuestro compañero de redacción, señor Salazar y el corresponsal y colaborador en este periódico señor Plaza Martínez, con objeto de adquirir una amplia y detallada información de este drama pasional que tanto interés ha despertado entre nuestros lectores, y en el público en general por las circunstancias especiales que en el mismo concurren y la forma casi folletinesca en que se ha desarrollado. En Níjar: Después de 45 minutos de viaje, estamos en el pueblo de Níjar, dirigiéndonos seguidamente al domicilio de nuestro corresponsal en aquella población, Don Ramón Jiménez quien nos recibió con la amabilidad que lo caracteriza, poniéndose a nuestra disposición para adquirir los mayores datos posibles, haciendo nuestra labor más fructífera. El señor Jiménez nos presentó al alcalde, con quien hablamos durante breves momentos. Al interrogarle acerca del crimen cometido en aquel término, nos manifestó que le había impresionado tanto, que no le era agradable hablar de él, hasta el punto que no había querido preguntar nada que se relacionase con él. Despidiéndonos de la primera autoridad municipal, para empezar nuestra labor de información. Comentando el crimen: Al entrar en la Plaza de la Constitución observamos varios corrillos de personas que se hallaban estacionadas frente al Ayuntamiento, las cuales comentaban silenciosamente el asesinato, motivo de consternación de aquellos vecinos y comidilla del día, como vulgarmente se dice, en todas las tertulias y reuniones. Dichos individuos se encontraban frente a las oficinas que son ocupadas por el Juzgado municipal en la Casa Consistorial. En ellas, hallábase el juez de instrucción del Juzgado de Sorbas, don Ambrosio López Jiménez, con el secretario don Juan Beltrán, tomando declaración a las personas que han sido detenidas. Cómo se desarrolló el drama desde los primeros momentos: En el cortijo denominado El Fraile, propiedad de don Antonio Acosta, del término municipal de Níjar, habita un anciano, cultivador de dicha finca. En unión de éste vive su hija Francisca Cañadas Morales, de 20 años de edad, la que desde hace dos años mantenía relaciones amorosas con Casimiro Pérez Pino, de 29 años de edad, jornalero y que reside accidentalmente en el cortijo llamado del Jabonero, distante 4 kilómetros aproximadamente al de su novia. Esta había sido dotada por sus familiares, legándole 15.000 pesetas. Como durante el transcurso de los 2 años de relaciones no habían tenido la más insignificante discrepancia, acordaron contraer matrimonio. La ceremonia religiosa había sido fijada para el día 23 del actual, a las tres de la madrugada, en la iglesia de la barriada de Fernán Pérez. La noche trágica: Por la tarde del día 22 llegó a la casa cortijo de su prometida, Casimiro Pérez, y desde entonces, la familia de la novia comenzó a dar efectividad a los preparativos necesarios, para que, antes de la llegada de los numerosos invitados que habrían de asistir a la boda, estuviese todo dispuesto para solemnizar el acto. Para ello, sacrificaron dos corderos, teniendo además preparados gran cantidad de licores y dulces. Como es lógico, el sacerdote de la iglesia donde el enlace se proyectaba efectuar había sido de antemano y con la anticipación oportuna, avisado al efecto.
(CONTINUARÁ)
EL CRIMEN DE NÍJAR
PARTE I
LA HISTORIA (CONTINUACIÓN) Pero qué cruel fue la prensa con esta mujer.
Llegada de invitados: Próximamente a las 9, comenzaron a llegar a la casa cortijo de la contrayente, las personas invitadas. Entre ellas, figuraba un primo hermano de la novia, llamado Francisco Montes Cañadas, que habitaba en el cortijo de Los Pipaces de la cortijera llamada de los Montes. Al llegar éste a la casa, Casimiro y su novia Francisca, se encontraban en la cocina hablando confidencialmente y entonces, Francisco Montes parece ser que mostró gran interés por la conversación que sostenían animadamente los novios. Entre tanto, continuaban llegando personas invitadas en distintas caballerías de las cortijadas próximas. Serían aproximadamente las diez y media de la noche, cuando Casimiro se sintió ligeramente indispuesto, cosa que hubo de comunicar a la que pronto habría de aceptarla como esposa. Entonces, ella le facilitó una manta, invitándole a que pasara a descansar. Dícese que fue el primo de la novia, Francisco Morales, quien al mostrarse interesado por ella la preguntó: Prima ¿te vas a Casar A lo que contestó ella afirmativamente. Debió hacerlo de forma como si no le interesara mucho su novio, por cuanto su primo le propuso la fuga con él y tras breves palabras quedó concertada entre ambos. Para no infundir sospechas dijo ella a los familiares y personas invitadas que allí se encontraban que iba a entrar a sus habitaciones con objeto de vestirse. Entretanto su primo salió a la calle sin ser advertido en el acto de su salida. A poco, y ya provisto éste de la caballería que le condujera, esperó a su prima, quien más tarde se unió a él, emprendiendo la fuga torpemente pues marcharon por el camino por donde forzosamente habían de encontrarse con las personas que, invitadas, habrían de marchar en dirección a la casa cortijo. Transcurrió algún tiempo, y como las numerosas personas que se encontraban en la casa cortijo y muy especialmente los familiares de la novia, notaran la ausencia de ella, hubieron de buscarla, y tras de hacerlo por todas partes infructuosamente, desistieron de proseguir sus indagaciones, sospechando acertadamente que había desaparecido. Contrariados los invitados por tan sorprendente como inesperado acontecimiento, acordaron retirarse a sus hogares, cumplimentando el acuerdo seguidamente.
El crimen: Apenas habían andado los fugitivos 3 o 4 kilómetros, un individuo misterioso y enmascarado les salió al encuentro. La caballería se espantó y la novia, según ella, sufrió un síncope, sin que se diera cuenta de lo que después había de ocurrir. Lo cierto es, que a su primo le hicieron tres disparos a quemarropa con un revólver Smith de calibre 9. Uno de los proyectiles le penetró por el ojo izquierdo con orificio de salida por la región parietal derecha, en sentido oblicuo, produciéndole una herida mortal de necesidad. Los otros disparos le alcanzaron superficialmente, sin orificios de entrada, y sólo se le apreciaban los fogonazos en la corbata, cuello y barba. Dice la novia, que cuando recobró sus sentidos y vió que su primo era cadáver, de nuevo sufrió otro ataque. El muerto aparecía yaciendo sobre tierra en posición de cúbito supino, con las manos y cara ensangrentadas, en medio de un gran charco de sangre. Se descubre el cadáver por un hermano de éste: Un hermano del interfecto que había concurrido en su condición de invitado a casa de la novia, al regresar a su domicilio encontró en el camino el cadáver de su hermano. La impresión y el dolor que experimentara fueron inenarrables. Este retornó al cortijo en donde pidió auxilio. Al regresar de nuevo al lugar donde se hallaba su hermano, y de una palmera que hay en el camino frente a donde se encontraba el cadáver, surgió la novia pidiéndole que la matase, por considerar que ella había sido la culpable de lo sucedido. Avisada la Benemérita, ésta detuvo a la joven protagonista de este drama pasional. Presentaba ésta varias erosiones en las manos, garganta, pierna y orejas, así como también desgarradas las ropas que vestía. Junto al cadáver fueron encontrados dos proyectiles sin disparar. Detención del novio: Este al ser avisado de lo ocurrido, quiso ir en persecución de su amada y del raptor, pero los familiares de ella y las personas que en el cortijo se hallaban le hicieron desistir de sus propósitos, llevándole al cortijo del Jabonero, donde este habita, por camino distinto al en que se encontraba el cadáver. Momentos después de llegar a su domicilio, Casimiro Pérez fue detenido por la Benemérita. Un encuentro que facilita una pista: Cuando los fugados marchaban huidos por el camino ya indicado, un hermano del novio llamado José Pérez Pino, acompañado de su mujer, Carmen Cañadas Morales que es hermana de la novia fugada, y de dos hijos de corta edad, que se encaminaban con dirección a la casa cortijo para asistir a la boda anunciada, se supone que encontraron a la pareja fugada. Lo que entonces ocurriera, o se ignore, o de ello se guarda cierta prudente reserva. La novia conducía consigo un pañuelo de gran tamaño en el que guardaba un vestido, pues según nuestras noticias, el que llevaba puesto era el de nupcias.
Actúan las autoridades judiciales: El Juzgado municipal instruyó las primeras diligencias, tomando declaración a los novios que desde los primeros momentos quedaron encarcelados. Casimiro negó tener participación alguna en el hecho. Después se procedió a la detención del hermano del novio, José Pérez Pino; detención a la que se concede gran importancia. Una hermana del muerto pierde sus facultades mentales: Una hermana del interfecto llamada Antonia Morales Cañadas, de estado viuda, a consecuencia de la fuerte impresión recibida, al tener conocimiento del crimen, ha perdido sus facultades mentales. Dícese que también ha contribuido a enfermar súbitamente a esta mujer, el hecho de que por ciertas suspicacias se haya dejado entrever, que esta aconsejara la fuga de su hermano con la que próximamente iba a ser esposa de Casimiro Pérez Pino. También ha sido detenida la mujer del hermano del novio que a su vez, es hermana de la novia. Los rivales en el amor de Antonia (debe decir Francisca) eran amigos; el mismo novio fue por la tarde el día de autos a invitar a su contrincante para que asistiera a la boda. Ayer le fue practicada la autopsia al cadáver de esta sangrienta tragedia. Se persona en las diligencias el juez de instrucción del partido: Ayer tarde a las seis llegó a Níjar el coloso y culto juez de instrucción de Sorbas don Ambrosio López, personándose en las diligencias instruidas en este apasionado suceso. El digno juez acto seguido, personalmente tomó declaración a todos los detenidos ratificando después de efectuadas éstas, la incomunicación a que estaba sometido José Pérez Pino y levantando la del novio Casimiro Pérez Pino. Por lo avanzado de la hora, después de terminadas sus primeras instrucciones, el juez, señor López Jiménez, suspendió sus tareas hasta la mañana de hoy en que las proseguirá dando comienzo a ellas, con una inspección ocular al sitio donde se desarrolló el suceso. Dictamen de autopsia: Los médicos señores don Joaquín Rodríguez y don José Morales que han practicado la autopsia al cadáver de la víctima de esta tragedia, a requerimiento del juez, hoy ampliarán su dictamen. Hemos de constatar nuestra reconocida gratitud a todas las autoridades que se han personado en este suceso y muy especialmente al juez señor López Jiménez, por las facilidades que nos ha prestado en el desempeño de nuestra labor periodística. Como que este suceso se encuentra envuelto en un indescifrable misterio, la dirección de DIARIO DE ALMERÍA atenta siempre a satisfacer la curiosidad de sus lectores, ha dispuesto que el redactor señor Plaza Martínez continúe en el lugar donde ha tenido desarrollo esta tragedia para que prosiga la información de ella, con el mayor cúmulo de datos que posible sea.”
(CONTINUARÁ)
PARTE I
LA HISTORIA (CONTINUACIÓN) Pero qué cruel fue la prensa con esta mujer.
Llegada de invitados: Próximamente a las 9, comenzaron a llegar a la casa cortijo de la contrayente, las personas invitadas. Entre ellas, figuraba un primo hermano de la novia, llamado Francisco Montes Cañadas, que habitaba en el cortijo de Los Pipaces de la cortijera llamada de los Montes. Al llegar éste a la casa, Casimiro y su novia Francisca, se encontraban en la cocina hablando confidencialmente y entonces, Francisco Montes parece ser que mostró gran interés por la conversación que sostenían animadamente los novios. Entre tanto, continuaban llegando personas invitadas en distintas caballerías de las cortijadas próximas. Serían aproximadamente las diez y media de la noche, cuando Casimiro se sintió ligeramente indispuesto, cosa que hubo de comunicar a la que pronto habría de aceptarla como esposa. Entonces, ella le facilitó una manta, invitándole a que pasara a descansar. Dícese que fue el primo de la novia, Francisco Morales, quien al mostrarse interesado por ella la preguntó: Prima ¿te vas a Casar A lo que contestó ella afirmativamente. Debió hacerlo de forma como si no le interesara mucho su novio, por cuanto su primo le propuso la fuga con él y tras breves palabras quedó concertada entre ambos. Para no infundir sospechas dijo ella a los familiares y personas invitadas que allí se encontraban que iba a entrar a sus habitaciones con objeto de vestirse. Entretanto su primo salió a la calle sin ser advertido en el acto de su salida. A poco, y ya provisto éste de la caballería que le condujera, esperó a su prima, quien más tarde se unió a él, emprendiendo la fuga torpemente pues marcharon por el camino por donde forzosamente habían de encontrarse con las personas que, invitadas, habrían de marchar en dirección a la casa cortijo. Transcurrió algún tiempo, y como las numerosas personas que se encontraban en la casa cortijo y muy especialmente los familiares de la novia, notaran la ausencia de ella, hubieron de buscarla, y tras de hacerlo por todas partes infructuosamente, desistieron de proseguir sus indagaciones, sospechando acertadamente que había desaparecido. Contrariados los invitados por tan sorprendente como inesperado acontecimiento, acordaron retirarse a sus hogares, cumplimentando el acuerdo seguidamente.
El crimen: Apenas habían andado los fugitivos 3 o 4 kilómetros, un individuo misterioso y enmascarado les salió al encuentro. La caballería se espantó y la novia, según ella, sufrió un síncope, sin que se diera cuenta de lo que después había de ocurrir. Lo cierto es, que a su primo le hicieron tres disparos a quemarropa con un revólver Smith de calibre 9. Uno de los proyectiles le penetró por el ojo izquierdo con orificio de salida por la región parietal derecha, en sentido oblicuo, produciéndole una herida mortal de necesidad. Los otros disparos le alcanzaron superficialmente, sin orificios de entrada, y sólo se le apreciaban los fogonazos en la corbata, cuello y barba. Dice la novia, que cuando recobró sus sentidos y vió que su primo era cadáver, de nuevo sufrió otro ataque. El muerto aparecía yaciendo sobre tierra en posición de cúbito supino, con las manos y cara ensangrentadas, en medio de un gran charco de sangre. Se descubre el cadáver por un hermano de éste: Un hermano del interfecto que había concurrido en su condición de invitado a casa de la novia, al regresar a su domicilio encontró en el camino el cadáver de su hermano. La impresión y el dolor que experimentara fueron inenarrables. Este retornó al cortijo en donde pidió auxilio. Al regresar de nuevo al lugar donde se hallaba su hermano, y de una palmera que hay en el camino frente a donde se encontraba el cadáver, surgió la novia pidiéndole que la matase, por considerar que ella había sido la culpable de lo sucedido. Avisada la Benemérita, ésta detuvo a la joven protagonista de este drama pasional. Presentaba ésta varias erosiones en las manos, garganta, pierna y orejas, así como también desgarradas las ropas que vestía. Junto al cadáver fueron encontrados dos proyectiles sin disparar. Detención del novio: Este al ser avisado de lo ocurrido, quiso ir en persecución de su amada y del raptor, pero los familiares de ella y las personas que en el cortijo se hallaban le hicieron desistir de sus propósitos, llevándole al cortijo del Jabonero, donde este habita, por camino distinto al en que se encontraba el cadáver. Momentos después de llegar a su domicilio, Casimiro Pérez fue detenido por la Benemérita. Un encuentro que facilita una pista: Cuando los fugados marchaban huidos por el camino ya indicado, un hermano del novio llamado José Pérez Pino, acompañado de su mujer, Carmen Cañadas Morales que es hermana de la novia fugada, y de dos hijos de corta edad, que se encaminaban con dirección a la casa cortijo para asistir a la boda anunciada, se supone que encontraron a la pareja fugada. Lo que entonces ocurriera, o se ignore, o de ello se guarda cierta prudente reserva. La novia conducía consigo un pañuelo de gran tamaño en el que guardaba un vestido, pues según nuestras noticias, el que llevaba puesto era el de nupcias.
Actúan las autoridades judiciales: El Juzgado municipal instruyó las primeras diligencias, tomando declaración a los novios que desde los primeros momentos quedaron encarcelados. Casimiro negó tener participación alguna en el hecho. Después se procedió a la detención del hermano del novio, José Pérez Pino; detención a la que se concede gran importancia. Una hermana del muerto pierde sus facultades mentales: Una hermana del interfecto llamada Antonia Morales Cañadas, de estado viuda, a consecuencia de la fuerte impresión recibida, al tener conocimiento del crimen, ha perdido sus facultades mentales. Dícese que también ha contribuido a enfermar súbitamente a esta mujer, el hecho de que por ciertas suspicacias se haya dejado entrever, que esta aconsejara la fuga de su hermano con la que próximamente iba a ser esposa de Casimiro Pérez Pino. También ha sido detenida la mujer del hermano del novio que a su vez, es hermana de la novia. Los rivales en el amor de Antonia (debe decir Francisca) eran amigos; el mismo novio fue por la tarde el día de autos a invitar a su contrincante para que asistiera a la boda. Ayer le fue practicada la autopsia al cadáver de esta sangrienta tragedia. Se persona en las diligencias el juez de instrucción del partido: Ayer tarde a las seis llegó a Níjar el coloso y culto juez de instrucción de Sorbas don Ambrosio López, personándose en las diligencias instruidas en este apasionado suceso. El digno juez acto seguido, personalmente tomó declaración a todos los detenidos ratificando después de efectuadas éstas, la incomunicación a que estaba sometido José Pérez Pino y levantando la del novio Casimiro Pérez Pino. Por lo avanzado de la hora, después de terminadas sus primeras instrucciones, el juez, señor López Jiménez, suspendió sus tareas hasta la mañana de hoy en que las proseguirá dando comienzo a ellas, con una inspección ocular al sitio donde se desarrolló el suceso. Dictamen de autopsia: Los médicos señores don Joaquín Rodríguez y don José Morales que han practicado la autopsia al cadáver de la víctima de esta tragedia, a requerimiento del juez, hoy ampliarán su dictamen. Hemos de constatar nuestra reconocida gratitud a todas las autoridades que se han personado en este suceso y muy especialmente al juez señor López Jiménez, por las facilidades que nos ha prestado en el desempeño de nuestra labor periodística. Como que este suceso se encuentra envuelto en un indescifrable misterio, la dirección de DIARIO DE ALMERÍA atenta siempre a satisfacer la curiosidad de sus lectores, ha dispuesto que el redactor señor Plaza Martínez continúe en el lugar donde ha tenido desarrollo esta tragedia para que prosiga la información de ella, con el mayor cúmulo de datos que posible sea.”
(CONTINUARÁ)
EL CRIMEN DE NÍJAR
PARTE I
LA HISTORIA (CONTINUACIÓN) Según la prensa.
Diario de Almería día 26 de julio de 1928: “El misterioso crimen de Níjar. ¿Quién ha sido el asesino del hombre que confiado, raptó a una mujer cuando se disponía a casarse con su novio? Continuamos la información del sangriento drama ocurrido a cuatro kilómetros del cortijo del Fraile en término de Níjar. Por las circunstancias que en el mismo concurrieron ya conocidas, por el misterio de que está rodeado el crimen y por tratarse de que los protagonistas son personas las cuales en aquel pueblo gozan de buena conducta por su honradez y su laboriosidad, especialmente la víctima de este suceso, vivamente se hacen múltiples comentarios, por todas las personas avecindadas en aquellos contornos. Pero todas ellas, ya pasados los primeros momentos de consternación hácense al final de sus conjeturas esta pregunta: ¿Quién ha sido el asesino del hombre que, confiado raptó a una mujer que se disponía a casarse con su novio ¿es posible que el tupido velo que hoy cubre la verdad de cómo se desarrolló la sangrienta tragedia, quizás hasta dentro de unos días no se logre desgarrar y con ello ponernos en conocimiento del autor o autores del crimen. El matrimonio como negocio: Siempre, pero en estos nuestros actuales tiempos, por desgracia más que nunca, el matrimonio ha sido considerado por gentes desaprensivas como negocio, estando pendiente en todo momento del capital mayor o menor que pudieran aportar o tener los contrayentes de las familias. Esto, donde más casos lo evidencia es en los pueblos, en donde contraen matrimonio los primos y parientes, aconsejados por sus mayores ante la perspectiva de unir más interese, sin tener en cuenta las consecuencias funestas que más tarde estas calculadas uniones acarrean. Algo parecido a estas consideraciones que anotamos es lo que los comentarios de este trágico suceso, que haya tenido como punto de origen el mismo lo que nada de extraño tendría ante el lote de 15.000 pesetas de la novia, lo cual a más de carecer de atractivos de belleza padece un pronunciado defecto físico en una pierna.
Ante lo irremediable: El novio Casimiro Pérez Pino, pasados los primeros momentos de indignación al enterarse de que había sido burlado por la mujer que había elegido por esposa, se encuentra sereno. Como quiera de haber salido Casimiro de la sala donde entrara a descansar la noche de autos, forzosamente hubiera sido visto por las numerosas personas que en la casa cortijo se hallaban, las cuales no le vieron salir sino a hora avanzada, detalle importante que afianza el hermano del muerto y como parece deducirse que cuando el novio salió de la habitación ya se había consumado el delito se desprende lógicamente que no interviniera en la consumación de esta tragedia. Lo evidencia aún más las protestas que hiciera al tener conocimiento de lo sucedido, pues intentó ir en persecución de los fugados, a lo que hubieron de hacerle desistir las personas que allí se encontraban, llevándose al cortijo del Jabonero, donde reside, por distinto camino al en que apareció el cadáver de Francisco Montes Cañadas.
A la novia intentaron ahogarla: La novia desempeña en este drama pasional, según se desprende de cuanto llevamos relatado, un papel principal e importante. Dícese que ella, además de lo ya manifestado, ha dicho que no sabía nada acerca de la persona que asesinara a su primo, pues solo vio en el camino interponerse entre ellos dos bultos, uno que hizo los disparos y el otro mientras la asió del cuello, queriendo ahogarla, perdiendo entonces el sentido. Cuando le recuperó de nuevo vió a su primo cadáver, manando sangre, y la impresión sufrida hizo que le volviese el ataque que en principio sufriera.
La luz de los disparos fue apercibida por unos familiares de los protagonistas del suceso: José Pérez Pino, hermano del novio, acompañado de su mujer, hermana de la novia, en unión de dos hijos de corta edad, se encontraron según versiones, a los primos fugados, se dice que han manifestado que al llegar próximos a los fugitivos, sintieron gemidos y ayes de dolor, así como también las detonaciones de los tres disparos, llegando a recordar y hasta casi concretar la dirección que tomaran las luces de los tiros de revólver que se hicieron contra la víctima. A la declaración prestada por José Pérez Pino y la mujer de éste se le concede gran importancia. ¿Con quién sostuvo lucha violenta la novia? Como ya saben nuestros lectores, la novia Francisca Cañadas Morales presentaba síntomas de que tuvo que sostener una violenta lucha con el autor o autores de este suceso. Quiénes fueran, éste o éstos, es de presumir que conocían a los fugados y si luchó con ellos, palabras de encono y de indignación expresadas en este trance de terror, a la vez que de compasión para ver si así se evitaba la tragedia, debieron surgir de labios de aquel o aquellos, por lo que, a pesar de la oscuridad de la noche, la novia bien es posible que pudiera aportar algunos datos a las autoridades judiciales que contribuyeran al descubrimiento del asesino de su primo.
Otro detalle de importancia: Existe otro detalle que ya hubimos de dar a conocer a nuestros lectores oportunamente; detalle importantísimo que de fijo no habrá pasado desapercibido para las autoridades judiciales. ¿Cómo es que después de cometido el crimen apareció la caballería con la que se sirvió la víctima para llevarse a su prima, en la casa cortijo de ésta, con la cayada de que era portador la víctima? ¿Quién sino el autor del asesinato pudo llevar allí la caballería? Pues la bestia, ella por sí sola y, como ya expresamos en nuestra primera información obedeciendo a sus naturales instintos hubiera marchado con dirección a casa de su amo. Hasta ahora no se ha dicho que el muerto hubiera tenido relaciones con su prima. ¿Pero entonces por qué se dice que todas las personas invitadas a la boda, al darse cuenta de que la novia había desaparecido de la casa sospecharon que se encontraba en la casa de su primo en unión de éste? Claro está que en estas suposiciones hubieran acertado de no haber surgido la tragedia, ignorada hasta más tarde por las personas que así pensaran. Otra víctima: Entre las numerosas personas víctimas de este drama se destaca la figura del padre de la novia. Un anciano, bajo el paso de sus años en el panorama de la finca y del campo en donde tantos años trabajara, ve al testigo tenebroso de este trágico suceso y con cortada frase, penosa por el sufrimiento que experimenta, expone que la alegría de aquellos parajes que eran toda su vida se ha trocado en tenebrosa crueldad que siempre y de manera constante hará vivir en él, el triste recuerdo de la desgracia ocurrida. Con razón sobrada, en sus últimos días, las tierras que labrara con cariño, serán en lo sucesivo desolados terruños que gravitarán sobre su calenturiento cerebro, acusadores del crimen de que fueron mudos testigos. Su hija, a la que había dotado tal vez por no ser agraciada le ha correspondido con una acción indigna, causa primordial de esta tragedia sangrienta en la que hasta ahora solo son víctimas personas mayores, pero ¡quién sabe, si cuando el descubrimiento surja de manera inminente como se espera, alcance el infortunio a inocentes e infantiles criaturas. Actuación plausible: Es de esperar que practicadas las diligencias todas para el esclarecimiento de este suceso, por el culto y digno juez de Instrucción de Sorbas, don Ambrosio López, quien desde los primeros momentos de su actuación no descansa un solo momento en el cumplimiento de su elevado deber, no se haga esperar el esclarecimiento del misterio que rodea a este crimen.
(CONTINUARÁ)
PARTE I
LA HISTORIA (CONTINUACIÓN) Según la prensa.
Diario de Almería día 26 de julio de 1928: “El misterioso crimen de Níjar. ¿Quién ha sido el asesino del hombre que confiado, raptó a una mujer cuando se disponía a casarse con su novio? Continuamos la información del sangriento drama ocurrido a cuatro kilómetros del cortijo del Fraile en término de Níjar. Por las circunstancias que en el mismo concurrieron ya conocidas, por el misterio de que está rodeado el crimen y por tratarse de que los protagonistas son personas las cuales en aquel pueblo gozan de buena conducta por su honradez y su laboriosidad, especialmente la víctima de este suceso, vivamente se hacen múltiples comentarios, por todas las personas avecindadas en aquellos contornos. Pero todas ellas, ya pasados los primeros momentos de consternación hácense al final de sus conjeturas esta pregunta: ¿Quién ha sido el asesino del hombre que, confiado raptó a una mujer que se disponía a casarse con su novio ¿es posible que el tupido velo que hoy cubre la verdad de cómo se desarrolló la sangrienta tragedia, quizás hasta dentro de unos días no se logre desgarrar y con ello ponernos en conocimiento del autor o autores del crimen. El matrimonio como negocio: Siempre, pero en estos nuestros actuales tiempos, por desgracia más que nunca, el matrimonio ha sido considerado por gentes desaprensivas como negocio, estando pendiente en todo momento del capital mayor o menor que pudieran aportar o tener los contrayentes de las familias. Esto, donde más casos lo evidencia es en los pueblos, en donde contraen matrimonio los primos y parientes, aconsejados por sus mayores ante la perspectiva de unir más interese, sin tener en cuenta las consecuencias funestas que más tarde estas calculadas uniones acarrean. Algo parecido a estas consideraciones que anotamos es lo que los comentarios de este trágico suceso, que haya tenido como punto de origen el mismo lo que nada de extraño tendría ante el lote de 15.000 pesetas de la novia, lo cual a más de carecer de atractivos de belleza padece un pronunciado defecto físico en una pierna.
Ante lo irremediable: El novio Casimiro Pérez Pino, pasados los primeros momentos de indignación al enterarse de que había sido burlado por la mujer que había elegido por esposa, se encuentra sereno. Como quiera de haber salido Casimiro de la sala donde entrara a descansar la noche de autos, forzosamente hubiera sido visto por las numerosas personas que en la casa cortijo se hallaban, las cuales no le vieron salir sino a hora avanzada, detalle importante que afianza el hermano del muerto y como parece deducirse que cuando el novio salió de la habitación ya se había consumado el delito se desprende lógicamente que no interviniera en la consumación de esta tragedia. Lo evidencia aún más las protestas que hiciera al tener conocimiento de lo sucedido, pues intentó ir en persecución de los fugados, a lo que hubieron de hacerle desistir las personas que allí se encontraban, llevándose al cortijo del Jabonero, donde reside, por distinto camino al en que apareció el cadáver de Francisco Montes Cañadas.
A la novia intentaron ahogarla: La novia desempeña en este drama pasional, según se desprende de cuanto llevamos relatado, un papel principal e importante. Dícese que ella, además de lo ya manifestado, ha dicho que no sabía nada acerca de la persona que asesinara a su primo, pues solo vio en el camino interponerse entre ellos dos bultos, uno que hizo los disparos y el otro mientras la asió del cuello, queriendo ahogarla, perdiendo entonces el sentido. Cuando le recuperó de nuevo vió a su primo cadáver, manando sangre, y la impresión sufrida hizo que le volviese el ataque que en principio sufriera.
La luz de los disparos fue apercibida por unos familiares de los protagonistas del suceso: José Pérez Pino, hermano del novio, acompañado de su mujer, hermana de la novia, en unión de dos hijos de corta edad, se encontraron según versiones, a los primos fugados, se dice que han manifestado que al llegar próximos a los fugitivos, sintieron gemidos y ayes de dolor, así como también las detonaciones de los tres disparos, llegando a recordar y hasta casi concretar la dirección que tomaran las luces de los tiros de revólver que se hicieron contra la víctima. A la declaración prestada por José Pérez Pino y la mujer de éste se le concede gran importancia. ¿Con quién sostuvo lucha violenta la novia? Como ya saben nuestros lectores, la novia Francisca Cañadas Morales presentaba síntomas de que tuvo que sostener una violenta lucha con el autor o autores de este suceso. Quiénes fueran, éste o éstos, es de presumir que conocían a los fugados y si luchó con ellos, palabras de encono y de indignación expresadas en este trance de terror, a la vez que de compasión para ver si así se evitaba la tragedia, debieron surgir de labios de aquel o aquellos, por lo que, a pesar de la oscuridad de la noche, la novia bien es posible que pudiera aportar algunos datos a las autoridades judiciales que contribuyeran al descubrimiento del asesino de su primo.
Otro detalle de importancia: Existe otro detalle que ya hubimos de dar a conocer a nuestros lectores oportunamente; detalle importantísimo que de fijo no habrá pasado desapercibido para las autoridades judiciales. ¿Cómo es que después de cometido el crimen apareció la caballería con la que se sirvió la víctima para llevarse a su prima, en la casa cortijo de ésta, con la cayada de que era portador la víctima? ¿Quién sino el autor del asesinato pudo llevar allí la caballería? Pues la bestia, ella por sí sola y, como ya expresamos en nuestra primera información obedeciendo a sus naturales instintos hubiera marchado con dirección a casa de su amo. Hasta ahora no se ha dicho que el muerto hubiera tenido relaciones con su prima. ¿Pero entonces por qué se dice que todas las personas invitadas a la boda, al darse cuenta de que la novia había desaparecido de la casa sospecharon que se encontraba en la casa de su primo en unión de éste? Claro está que en estas suposiciones hubieran acertado de no haber surgido la tragedia, ignorada hasta más tarde por las personas que así pensaran. Otra víctima: Entre las numerosas personas víctimas de este drama se destaca la figura del padre de la novia. Un anciano, bajo el paso de sus años en el panorama de la finca y del campo en donde tantos años trabajara, ve al testigo tenebroso de este trágico suceso y con cortada frase, penosa por el sufrimiento que experimenta, expone que la alegría de aquellos parajes que eran toda su vida se ha trocado en tenebrosa crueldad que siempre y de manera constante hará vivir en él, el triste recuerdo de la desgracia ocurrida. Con razón sobrada, en sus últimos días, las tierras que labrara con cariño, serán en lo sucesivo desolados terruños que gravitarán sobre su calenturiento cerebro, acusadores del crimen de que fueron mudos testigos. Su hija, a la que había dotado tal vez por no ser agraciada le ha correspondido con una acción indigna, causa primordial de esta tragedia sangrienta en la que hasta ahora solo son víctimas personas mayores, pero ¡quién sabe, si cuando el descubrimiento surja de manera inminente como se espera, alcance el infortunio a inocentes e infantiles criaturas. Actuación plausible: Es de esperar que practicadas las diligencias todas para el esclarecimiento de este suceso, por el culto y digno juez de Instrucción de Sorbas, don Ambrosio López, quien desde los primeros momentos de su actuación no descansa un solo momento en el cumplimiento de su elevado deber, no se haga esperar el esclarecimiento del misterio que rodea a este crimen.
(CONTINUARÁ)
EL CRIMEN DE NÍJAR
PARTE I
LA HISTORIA (CONTINUACIÓN (Cruelmente contada por la prensa de la época que se ensañó con esta mujer, ahora más aclarada por el periodista Don Antonio Ramos Espejo.)
Después de aquella ruptura dramática, Francisca Cañadas siguió su vida en el Hualí (cerca de Níjar). Don Leocadio, su historia de cuando se cruzó con ella cuando iba en bicicleta a Níjar en el cortijo me recuerda también a mi padre, que le pasó lo mismo, también viajaba en bicicleta entonces, cuando trabajaba en la Administración de la Finca Los Pipaces del Instituto Nacional de Colonización (junto a lo que hoy es San Isidro) y se cruzó alguna vez con ella. Allí guardó luto por el novio muerto, su primo Paco Montes.
Por su parte Casimiro Pérez, el novio plantado, rehizo su vida familiar en San José de Cabo de Gata.
En cuanto a José Pérez Pino fue condenado pero por poco tiempo, pues una amnistía le indultó en 1931 y solo pasó 3 años en la cárcel. Mi padre también lo conoció en un cortijo donde paraba a descansar en su travesía de Níjar al Cortijo del Playazo con la yegua, aunque tristemente ya no está para recordarme qué cortijo era ese.
En su obra, Lorca puso un mayor acento de cambios en los instrumentos de la muerte. En Bodas de sangre mueren con heridas de cuchillo, los 2 contrincantes: Leonardo y el novio. En la realidad murió solo Paco Montes y de tres disparos de pistola. También cambia de fuga: los amantes del suceso huyen en una mula parda. Los amantes de Bodas de Sangre a lomos de un caballo, más veloz y simbólico.
” Yo lo tengo en la memoria como si lo estuviera viendo todo- comenta una anciana de Los Albaricoques-. Dicen que ella estaba gobernándose el pelo cuando llegó el primo. Y Paca le dijo: “ Primo, hazme feliz”. Y el joven contestó: “ hecho está”. Y se escaparon. Pero todavía no se había puesto el traje de novia. Aquel muchacho, mejorando ustedes los presentes, y dispensen ustedes porque todo hay que decirlo, era guapísimo. Tenía un cuerpo precioso. Y cuando yo vi aquel charco de sangre. Eso sí que lo vi yo con mis propios ojos. ¡Virgen santísima, qué lástima de muchacho! Se escaparon, por lo que dicen, por lo alto del corral. La mula la tenía preparada con su salea, sus aguaderas, y, por lo que contaron, Paca había advertido a su primo que cambiaran de camino. Seguro que algo se estaba maliciando. Pero no torcieron. Era su sino.”
El cortijo del Fraile donde ocurrieron los hechos, es un enorme caserón aislado con torre de campanario, que recuerda aquellos tiempos cuando el amo hacía sonar la campana para que los obreros rezaran el ángelus. Lo del amo o señorito a mí me recuerda personalmente a alguien que tiene un cortijo en Ronda. La casa, el mayor cortijo de aquellos alrededores, está situada entre Los Albaricoques y Los Martínez, muy cerca también de Rodalquilar. En aquel lugar se atenúa el desierto y la proximidad del mar y las montañas dota a la tierra de más humedad para la labranza. El tío Frasco Cañadas se había hecho de dinero labrando las tierras de los Acosta, que se lo habían dejado en régimen de aparcería. Detrás de la fachada principal están situados los corrales y dos eras. La habitación, desde la que saltó la novia, se encuentra en un segundo piso y da a un tejado de terrizo, desde el que se baja por una rampa hasta las cuadras. Por un lateral del cortijo, en dirección norte, hacia el interior del desierto, salieron los novios a lomos de una mula parda. Los novios tomaron la dirección de Los Pipaces. La madre de Paco Montes (viuda) esperaba a los primos amantes, a la nueva pareja, en su casa de los Montes de Arriba, donde celebraría la boda, en Cortijo Hermoso.
A una legua de viaje, en la llamada Haza de la Capellanía, en el camino de la Serrata fueron sorprendidos los novios. En el lugar del suceso, junto a la palmera que permitió el escondite de José Pérez y Carmen Cañadas Morales, se colocó una cruz. Todos los caminantes que transitaban por aquel sitio se detenían al pasar por la cruz, le echaban una piedra blanca y le rezaban un padrenuestro como exigía la tradición. La cruz de hierro desapareció hace años cuando se arregló el camino. Hasta el último momento de su vida, Paquita vivió recluída en su casa. En enero de 1987 hice la última visita a Paquita. Volví a llamar a la puerta de su casa. Estaba cerrada. Su sobrina seguía ejerciendo el papel de guardiana de la intimidad más estricta de su tía.
- ¿Puedo hablar con Paca?- le pregunto. Encuentro un muro de silencio.
Insisto:
- ¿Usted es la sobrina de Paca…?
- Sí.-contesta cortante.
- ¿Puedo hablar con ella?
-No.
-Es sólo, para saludarla.
-No. Y márchese.
- ¿Cómo está?
-Mal.
La soledad del Hualí había quedado rota por la instalación, cerca de la casa de Paca, de un pequeño taller de jarapa. Carmen, la hermana con la cabeza ida. Un día, después de tantos años sin hablarse, Carmen se atrevió a abrir la puerta de la casa de su hermana, a la que la noche de la fuga intentó ahogar en el camino de La Serrata, donde su marido había dejado muerto a Paco Montes, y se arrojó de rodillas a los pies de la cama de Paca implorando su perdón.
A Casimiro se le recuerda sentado en una mecedora frente al mar al atardecer en la puerta de su cortijo en San José de Cabo de Gata. Fue “ un mal sino. Que Dios la perdone”, y que salvo pena y lástima no sentía más. Viva imagen de la resignación, el novio de las auténticas bodas de sangre, fue el único protagonista que reconstruyó su vida. Se casó y tuvo hijos. El 9 de julio de 1987, casi al cumplirse el 59 aniversario del crimen, Francisca Cañadas Morales, a los 84 años, cerró para siempre sus ojos en El Hualí. Coincidencias del destino, Casimiro, a sus 89 años, se enteró de la muerte de Paquita por la radio. Por un instante, con los ojos en la oscuridad, pensaría en aquel girónde desamor que Paquita le hizo sufrir. El tiempo le permitió decirle adiós sin ira. Hasta después de muerta Paquita hubo de sufrir la soledad, el anonimato. Como si la familia creyera todavía que alguien la estuviera buscando para dar explicaciones. Abandonada entre quienes tanto la condenaron, su papel de mártir de una sociedad intransigente, iba a pasar a la historia como la novia de la fuga de Lorca. Cuando el cortejo fúnebre entró en el cementerio de Níjar, pasó forzosamente delante de la tumba de Paco Montes. Qué mirada. 59 años ya. Qué larga espera. Ni Lorca podía haber imaginado aquella puesta en escena para el encuentro definitivo. Así cayó el telón del último acto del drama de Paca la Coja, la siempre novia de Níjar, en el día luminoso que acudió a la última llamada de su amante.
Aunque el telón del drama habría de alzarse para un último responso. Tres años después, en San José, mirando serenamente los azules intensos del mar, Casimiro Pérez se despedía de su público a los 93 años.
Mi agradecimiento a la fuente, el periodista don Antonio Ramos Espejo, por despejarnos de la triste idea del suceso, que nos narró la prensa de la época. Tan maltratada por la prensa de la época y por una sociedad que le imponía sus rigurosos códigos de honor, venganza y casta, el nombre de Paquita Cañadas debiera inscribirse como una heroína de su tiempo después de haber sido despellejada por todos.
FIN PARTE I
PARTE I
LA HISTORIA (CONTINUACIÓN (Cruelmente contada por la prensa de la época que se ensañó con esta mujer, ahora más aclarada por el periodista Don Antonio Ramos Espejo.)
Después de aquella ruptura dramática, Francisca Cañadas siguió su vida en el Hualí (cerca de Níjar). Don Leocadio, su historia de cuando se cruzó con ella cuando iba en bicicleta a Níjar en el cortijo me recuerda también a mi padre, que le pasó lo mismo, también viajaba en bicicleta entonces, cuando trabajaba en la Administración de la Finca Los Pipaces del Instituto Nacional de Colonización (junto a lo que hoy es San Isidro) y se cruzó alguna vez con ella. Allí guardó luto por el novio muerto, su primo Paco Montes.
Por su parte Casimiro Pérez, el novio plantado, rehizo su vida familiar en San José de Cabo de Gata.
En cuanto a José Pérez Pino fue condenado pero por poco tiempo, pues una amnistía le indultó en 1931 y solo pasó 3 años en la cárcel. Mi padre también lo conoció en un cortijo donde paraba a descansar en su travesía de Níjar al Cortijo del Playazo con la yegua, aunque tristemente ya no está para recordarme qué cortijo era ese.
En su obra, Lorca puso un mayor acento de cambios en los instrumentos de la muerte. En Bodas de sangre mueren con heridas de cuchillo, los 2 contrincantes: Leonardo y el novio. En la realidad murió solo Paco Montes y de tres disparos de pistola. También cambia de fuga: los amantes del suceso huyen en una mula parda. Los amantes de Bodas de Sangre a lomos de un caballo, más veloz y simbólico.
” Yo lo tengo en la memoria como si lo estuviera viendo todo- comenta una anciana de Los Albaricoques-. Dicen que ella estaba gobernándose el pelo cuando llegó el primo. Y Paca le dijo: “ Primo, hazme feliz”. Y el joven contestó: “ hecho está”. Y se escaparon. Pero todavía no se había puesto el traje de novia. Aquel muchacho, mejorando ustedes los presentes, y dispensen ustedes porque todo hay que decirlo, era guapísimo. Tenía un cuerpo precioso. Y cuando yo vi aquel charco de sangre. Eso sí que lo vi yo con mis propios ojos. ¡Virgen santísima, qué lástima de muchacho! Se escaparon, por lo que dicen, por lo alto del corral. La mula la tenía preparada con su salea, sus aguaderas, y, por lo que contaron, Paca había advertido a su primo que cambiaran de camino. Seguro que algo se estaba maliciando. Pero no torcieron. Era su sino.”
El cortijo del Fraile donde ocurrieron los hechos, es un enorme caserón aislado con torre de campanario, que recuerda aquellos tiempos cuando el amo hacía sonar la campana para que los obreros rezaran el ángelus. Lo del amo o señorito a mí me recuerda personalmente a alguien que tiene un cortijo en Ronda. La casa, el mayor cortijo de aquellos alrededores, está situada entre Los Albaricoques y Los Martínez, muy cerca también de Rodalquilar. En aquel lugar se atenúa el desierto y la proximidad del mar y las montañas dota a la tierra de más humedad para la labranza. El tío Frasco Cañadas se había hecho de dinero labrando las tierras de los Acosta, que se lo habían dejado en régimen de aparcería. Detrás de la fachada principal están situados los corrales y dos eras. La habitación, desde la que saltó la novia, se encuentra en un segundo piso y da a un tejado de terrizo, desde el que se baja por una rampa hasta las cuadras. Por un lateral del cortijo, en dirección norte, hacia el interior del desierto, salieron los novios a lomos de una mula parda. Los novios tomaron la dirección de Los Pipaces. La madre de Paco Montes (viuda) esperaba a los primos amantes, a la nueva pareja, en su casa de los Montes de Arriba, donde celebraría la boda, en Cortijo Hermoso.
A una legua de viaje, en la llamada Haza de la Capellanía, en el camino de la Serrata fueron sorprendidos los novios. En el lugar del suceso, junto a la palmera que permitió el escondite de José Pérez y Carmen Cañadas Morales, se colocó una cruz. Todos los caminantes que transitaban por aquel sitio se detenían al pasar por la cruz, le echaban una piedra blanca y le rezaban un padrenuestro como exigía la tradición. La cruz de hierro desapareció hace años cuando se arregló el camino. Hasta el último momento de su vida, Paquita vivió recluída en su casa. En enero de 1987 hice la última visita a Paquita. Volví a llamar a la puerta de su casa. Estaba cerrada. Su sobrina seguía ejerciendo el papel de guardiana de la intimidad más estricta de su tía.
- ¿Puedo hablar con Paca?- le pregunto. Encuentro un muro de silencio.
Insisto:
- ¿Usted es la sobrina de Paca…?
- Sí.-contesta cortante.
- ¿Puedo hablar con ella?
-No.
-Es sólo, para saludarla.
-No. Y márchese.
- ¿Cómo está?
-Mal.
La soledad del Hualí había quedado rota por la instalación, cerca de la casa de Paca, de un pequeño taller de jarapa. Carmen, la hermana con la cabeza ida. Un día, después de tantos años sin hablarse, Carmen se atrevió a abrir la puerta de la casa de su hermana, a la que la noche de la fuga intentó ahogar en el camino de La Serrata, donde su marido había dejado muerto a Paco Montes, y se arrojó de rodillas a los pies de la cama de Paca implorando su perdón.
A Casimiro se le recuerda sentado en una mecedora frente al mar al atardecer en la puerta de su cortijo en San José de Cabo de Gata. Fue “ un mal sino. Que Dios la perdone”, y que salvo pena y lástima no sentía más. Viva imagen de la resignación, el novio de las auténticas bodas de sangre, fue el único protagonista que reconstruyó su vida. Se casó y tuvo hijos. El 9 de julio de 1987, casi al cumplirse el 59 aniversario del crimen, Francisca Cañadas Morales, a los 84 años, cerró para siempre sus ojos en El Hualí. Coincidencias del destino, Casimiro, a sus 89 años, se enteró de la muerte de Paquita por la radio. Por un instante, con los ojos en la oscuridad, pensaría en aquel girónde desamor que Paquita le hizo sufrir. El tiempo le permitió decirle adiós sin ira. Hasta después de muerta Paquita hubo de sufrir la soledad, el anonimato. Como si la familia creyera todavía que alguien la estuviera buscando para dar explicaciones. Abandonada entre quienes tanto la condenaron, su papel de mártir de una sociedad intransigente, iba a pasar a la historia como la novia de la fuga de Lorca. Cuando el cortejo fúnebre entró en el cementerio de Níjar, pasó forzosamente delante de la tumba de Paco Montes. Qué mirada. 59 años ya. Qué larga espera. Ni Lorca podía haber imaginado aquella puesta en escena para el encuentro definitivo. Así cayó el telón del último acto del drama de Paca la Coja, la siempre novia de Níjar, en el día luminoso que acudió a la última llamada de su amante.
Aunque el telón del drama habría de alzarse para un último responso. Tres años después, en San José, mirando serenamente los azules intensos del mar, Casimiro Pérez se despedía de su público a los 93 años.
Mi agradecimiento a la fuente, el periodista don Antonio Ramos Espejo, por despejarnos de la triste idea del suceso, que nos narró la prensa de la época. Tan maltratada por la prensa de la época y por una sociedad que le imponía sus rigurosos códigos de honor, venganza y casta, el nombre de Paquita Cañadas debiera inscribirse como una heroína de su tiempo después de haber sido despellejada por todos.
FIN PARTE I
