Don Leocadio es para mi una gran alegría volver a leer sus sabios comentarios, señal que todo va bien; como buen capitán de a bordo veo que tiene vd. controlada a toda la marinería y con toda la razón nos llama vd. al orden! quiero veros el pelo ¡Don Leocadio me aplicaré mas y escribiré, pero de verme el pelo eso ya es harina de otro costal, pues tengo bastante pelo ya blanco pero en “la terraza” brilla por su ausencia. Ya que he escrito un poco en términos marineros, no se si vd. sabe el comentario que a grito, hacía antiguamente el capitán del barco pirata cuando hacían un abordaje pues decía! al abordajee…… la mitad del botín para el capitán la otra mitad para los oficiales y si algo quedáse “que no quedáse” para la vil canalla de proa; la realidad Don Leocadio es que por desgracia hoy en el mundo ocurre lo mismo.
Don Ginés sus comentarios sobre las focas monje y los lobos marinos en aquellas “nuestras playas” le diré que los últimos lobos marinos vistos en la cala de Piedra Negra fue por los años treinta, vistos por José Gil nacido en El Cuervo pero joven fue a vivir al PARAISO trabajaba en el laboratorio de la fundición, era el padre de María la mujer de Pepe el Pintao, hera vecino mío, gran pescador tenía un bote en Piedra Negra y contaba que varias veces en compañía de algún otro compañero bajando la montaña veían dos bultos encima de las rocas y a medida que se acercaban aquellos animales les miraban y estando relativamente cerca se echaban al agua y los veían alejarse a la cala de poniente de Piedra Negra; tengo que decir que no hace mucho leí en una página de Roalquilar que al hijo de José Gil llamado Evaristo Gil Picón le habían editado un libro sobre la vida de Rodalquilar desde su nacimiento hasta el cierre de las minas; por desgracia editado a título póstumo. No he sabido volver a encontrar la página, creo haber leído que lo vendían en Rodalquilar y en Almería pero no recuerdo el nombre ni dirección quizás nuestra amiga Mari Carmen pueda enterarse y mandarme la dirección pues estoy seguro que escribió las gracias y desgracias de su PARAÍSO, En mis últimas vacaciones hablé con el, un enamorado de su pueblo y un buen amigo.
Aclaración: nunca vieron más de dos lobos marinos.
Don Leocadio al igual que vd. mis hijos nos juraron que las cenizas de su madre y las mías serán una sola, y serán esparcidas parte en aquellos llanos y otra en el agua en la zona de La Amatista, pues si es cierto que hay otra vida quiero que sea allí. Yo conozco “EL CIELO”.
Un abrazo.
Don Ginés sus comentarios sobre las focas monje y los lobos marinos en aquellas “nuestras playas” le diré que los últimos lobos marinos vistos en la cala de Piedra Negra fue por los años treinta, vistos por José Gil nacido en El Cuervo pero joven fue a vivir al PARAISO trabajaba en el laboratorio de la fundición, era el padre de María la mujer de Pepe el Pintao, hera vecino mío, gran pescador tenía un bote en Piedra Negra y contaba que varias veces en compañía de algún otro compañero bajando la montaña veían dos bultos encima de las rocas y a medida que se acercaban aquellos animales les miraban y estando relativamente cerca se echaban al agua y los veían alejarse a la cala de poniente de Piedra Negra; tengo que decir que no hace mucho leí en una página de Roalquilar que al hijo de José Gil llamado Evaristo Gil Picón le habían editado un libro sobre la vida de Rodalquilar desde su nacimiento hasta el cierre de las minas; por desgracia editado a título póstumo. No he sabido volver a encontrar la página, creo haber leído que lo vendían en Rodalquilar y en Almería pero no recuerdo el nombre ni dirección quizás nuestra amiga Mari Carmen pueda enterarse y mandarme la dirección pues estoy seguro que escribió las gracias y desgracias de su PARAÍSO, En mis últimas vacaciones hablé con el, un enamorado de su pueblo y un buen amigo.
Aclaración: nunca vieron más de dos lobos marinos.
Don Leocadio al igual que vd. mis hijos nos juraron que las cenizas de su madre y las mías serán una sola, y serán esparcidas parte en aquellos llanos y otra en el agua en la zona de La Amatista, pues si es cierto que hay otra vida quiero que sea allí. Yo conozco “EL CIELO”.
Un abrazo.
Don Ramón esto se publicó en verano de 2003:"La Consejería de Medio Ambiente ha editado dos libros sobre el origen y la época dorada del antiguo poblado minero de Rodalquilar.
Se trata de R o d a l q u i l a r, testimonio de su
p a s a d o, escrito por Evaristo Gil Picón y El oro y las minas de Rodalquilar, de Francisco Hernández Ortiz.
El primero hace un recorrido por el entorno natural del poblado, sus orígenes y el esplendor de la minería, y recoge el testimonio de once compañeros de trabajo
y vivencias. El libro de Evaristo Gil Picón es una obra humana y sencilla, recopilación de numerosas reflexiones personales, a titulo póstumo, de este rodalquileño enamorado y preocupado por su tierra, por su gente. Con una emotiva visión de la minería, sus notas nos desvelan ese terreno tan resbaladizo como son las vivencias de otros desde su perspectiva interior. Gracias a su tesón y esfuerzo podemos hoy conocer lo que sentían esos hombres y mujeres que vivieron momentos de alegría y desesperanza. Los dos libros los ha editado La Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, y es en la Oficina Administrativa del Parque, en Rodalquilar, donde se pueden conseguir."
Le puedo adelantar la contraportada:"Desde Tiempos Probablemente prehistóricos las distintas civilizaciones que han ocupado el territorio de la volcánica sierra de Cabo de Gata han extraído de sus generosos yacimientos metales como manganeso, plata, plomo, cinc, cobre, platino, oro y otros preciados minerales. Aunque la explotación aurífera de Rodalquilar se prolongo hasta 1990, no existe aún ninguna publicación que analice la dimensión del fenómeno social y económico que protagonizó este valle, ni de su impronta sobre un espacio, el Parque Natural Cabo de Gata - Níjar, mas tarde valorado como uno de los de mayor valor ecológico y ambiental de Europa. La Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía ha recopilado una vasta documentación sobre la actividad minera de Rodalquilar y de la evolución histórica de la minería en en general del Parque, con la que aborda la edición de una obra divulgativa, en forma de trilogía cuya intención es ayudar a comprender la dimensión del fenómeno histórico de Rodalquilar desde sus diferentes perspectivas. La segunda obra que presentamos recopila las aportaciones personales, desgraciadamente póstumas, de D. Evaristo Gil Picón, rodalquilareño, quién desde los 12 años y a lo largo de toda su vida profesional, desempeñó las más variadas funciones laborales posibles de realizar en el duro trabajo de las minas. Su obra aporta una emotiva visión de la minería de Rodalquilar y de la evolución histórica del poblado, desde una perspectiva interior, vivida, luchada día a día, con momentos de alegrías y de miserias. Sus reflexiones constituyen sobre todo un canto de esperanza y agradecimiento hacia el resto de sus compañeros: los mineros de Rodalquilar, pero, a su vez, conforman también un testimonio de gran valor antropológico: ¿cómo vivieron aquellos mineros los momentos de alegría durante el periodo de esplendor de su pueblo?, ¿cómo vivieron la desesperanza del final de la actividad?, ¿qué opinan, aún hoy, de todo ello? "
Seguramente que Dª Mari Carmen sabrá también la dirección en Almería donde lo tienen.
Saludos pronto, desde unas antiguas minas de plata en la costa tarifeña: " Silla del Papa".
Ginés Torres
Se trata de R o d a l q u i l a r, testimonio de su
p a s a d o, escrito por Evaristo Gil Picón y El oro y las minas de Rodalquilar, de Francisco Hernández Ortiz.
El primero hace un recorrido por el entorno natural del poblado, sus orígenes y el esplendor de la minería, y recoge el testimonio de once compañeros de trabajo
y vivencias. El libro de Evaristo Gil Picón es una obra humana y sencilla, recopilación de numerosas reflexiones personales, a titulo póstumo, de este rodalquileño enamorado y preocupado por su tierra, por su gente. Con una emotiva visión de la minería, sus notas nos desvelan ese terreno tan resbaladizo como son las vivencias de otros desde su perspectiva interior. Gracias a su tesón y esfuerzo podemos hoy conocer lo que sentían esos hombres y mujeres que vivieron momentos de alegría y desesperanza. Los dos libros los ha editado La Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, y es en la Oficina Administrativa del Parque, en Rodalquilar, donde se pueden conseguir."
Le puedo adelantar la contraportada:"Desde Tiempos Probablemente prehistóricos las distintas civilizaciones que han ocupado el territorio de la volcánica sierra de Cabo de Gata han extraído de sus generosos yacimientos metales como manganeso, plata, plomo, cinc, cobre, platino, oro y otros preciados minerales. Aunque la explotación aurífera de Rodalquilar se prolongo hasta 1990, no existe aún ninguna publicación que analice la dimensión del fenómeno social y económico que protagonizó este valle, ni de su impronta sobre un espacio, el Parque Natural Cabo de Gata - Níjar, mas tarde valorado como uno de los de mayor valor ecológico y ambiental de Europa. La Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía ha recopilado una vasta documentación sobre la actividad minera de Rodalquilar y de la evolución histórica de la minería en en general del Parque, con la que aborda la edición de una obra divulgativa, en forma de trilogía cuya intención es ayudar a comprender la dimensión del fenómeno histórico de Rodalquilar desde sus diferentes perspectivas. La segunda obra que presentamos recopila las aportaciones personales, desgraciadamente póstumas, de D. Evaristo Gil Picón, rodalquilareño, quién desde los 12 años y a lo largo de toda su vida profesional, desempeñó las más variadas funciones laborales posibles de realizar en el duro trabajo de las minas. Su obra aporta una emotiva visión de la minería de Rodalquilar y de la evolución histórica del poblado, desde una perspectiva interior, vivida, luchada día a día, con momentos de alegrías y de miserias. Sus reflexiones constituyen sobre todo un canto de esperanza y agradecimiento hacia el resto de sus compañeros: los mineros de Rodalquilar, pero, a su vez, conforman también un testimonio de gran valor antropológico: ¿cómo vivieron aquellos mineros los momentos de alegría durante el periodo de esplendor de su pueblo?, ¿cómo vivieron la desesperanza del final de la actividad?, ¿qué opinan, aún hoy, de todo ello? "
Seguramente que Dª Mari Carmen sabrá también la dirección en Almería donde lo tienen.
Saludos pronto, desde unas antiguas minas de plata en la costa tarifeña: " Silla del Papa".
Ginés Torres