Sí señor Patricio, a usted voy a contestar:
Primero no me confunda con otro personaje del cual no quiero hablar.
En segundo lugar, efectivamente algo tenía roto por lo cual, a tiempo no he podido llegar.
Resulta que se me rompió una albarca, estando muy lejos del lugar.
El regreso ha sido lento, mirando bien donde pisar.
Y cuando al Chorraor llego, vea que casualidad,
que no encuentro la esparteña.
¿Quien se la pudo llevar?
Tal vez alguno de la
Calle, que a la
fuente
agua vino a buscar,
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