De esta época cabe destacar la magnífica
portada del templo de estilo
gótico. La
iglesia sufrió muchas reformas a lo largo del siglo XVII y posteriores. Próximo a la
parroquia se ubica el
torreón del
Castillo. Y apenas en unos pasos el viajero llega a la
Casa del Cabildo, antiguo
Ayuntamiento construido a mediados del siglo XVI y de reciente restauración. Antes de dejar el
pueblo, merece la pena darse una vuelta por sus talleres artesanos, donde se fabrican objetos de guarnicionería, botas de montar y objetos de madera como los dornillos, realizados con madera de fresno.