El Santísima Trinidad (oficialmente Nuestra Señora de la Santísima Trinidad) fue un navío español de 120 cañones en un principio, ampliados hasta 140 con posterioridad. Fue el navío más grande de su época, por lo que recibía el apodo de "El Escorial de los mares", y fue uno de los pocos navíos de línea de cuatro
puentes que existieron. A pesar de ello, no resultaba muy eficaz por lo torpe y lento de su navegación.