No demasiado lejos, se encuentra la
iglesia de
San Pedro, obra
gótica del siglo XIV con añadidos barrocos del XVIII (la
fachada y la
torre). Sus partidarios se atrevieron a disputar la primacía del templo frente a la basílica de
Santa María, obligando a dictaminar al Tribunal de la Rota que, en 1764, concedió a esta última el título de "Iglesia Mayor, más Antigua, Insigne y Principal de
Arcos".