No se debe abandonar
Arcos de la Frontera sin disfrutar de sus
calles, salpicadas por hermosas
portadas de las numerosas
casas nobles que aquí se levantaron. Y sin acercarse hasta
el torno del
convento de las monjas mercedarias para adquirir su excelente
repostería. Contar con un
lago artificial, como es el el lago de Arcos en sus inmediaciones, hace factible la práctica de un gran número de
deportes naúticos, como el Kayak polo, esquí acuático, vela, remo,.. o simplemente poder disfrutar de un agradable
paseo en
barco, de un paraje natural declarado, de una playita totalmente equipada y con inmejorables vistas.