Permaneció bajo el dominio de la
Casa de Alcalá hasta la independencia municipal, siendo su vinculación tal que el
blasón de los Ribera y el
escudo de la población son idénticos. Con su majestuoso
caserío enclavado a orillas del
lago al que da nombre,
Bornos –
Cádiz y sus
pueblos blancos como hoja de ruta–, atesora en sus
calles vestigios de la
historia que lo ha moldeado a lo largo de los siglos. Cuenta con un patrimonio rico en
monumentos, pero también en
paisajes, que lo convierte en un destino de los que conquistan al primer instante.