Caminando por la Avd. Alcalde Vázquez Domar, justo en la
esquina con la
Calle Plaza Pequeña, se encuentra una llamativa
escultura dedicada al
toro de cuerda, un
homenaje a la tradicional
fiesta grazalemeña. Se trata de una impresionante escultura a tamaño real compuesta por dos figuras de dos hombres con una cuerda atada a un toro. Esta escultura fue inaugurada en 2014, obra del
escultor Alfredo Fillol Talens y se ha convertido en una de las principales atracciones que ver en
Grazalema. Justo en frente de esta escultura se encuentra una
pastelería en la que podréis degustar
palmeras de todos los tipos (de chocolate negro, chocolate kinder, ferrero rocher etc).