Cuando el Reino de Castilla tomó Jerez el 9 de octubre de 1264 a los musulmanes, en el periodo conocido como la Reconquista, la ciudad pasa a denominarse Xerez en castellano medieval, representando el fonema /ʃ/ (similar a la sh inglesa) con el grafema «X», como era regla en la época. A Xerez se le añadiría al poco tiempo de la Frontera, al encontrarse en la frontera con el Reino de Granada, y ser escenario habitual de escaramuzas y enfrentamientos entre ambos reinos.