JIMENA DE LA FRONTERA: V-JIMENA DE LA FRONTERA....

V-JIMENA DE LA FRONTERA.

Es una villa ubicada en la Comarca del Campo de Gibraltar y a una distancia de 157 km de Cádiz- Capital.
El núcleo urbano está formado por cuatro localidades, Los Ángeles o Estación de Jimena, San Pablo de Buceite y San Martín del Tesorillo.
Su término municipal está situado entre la Bahía de Algeciras y la Serranía de Ronda y está incluido en el Parque Natural de los Alcornocales.
En su término municipal discurre el río Guadarranque y el rio Guadiaro y finalmente el río Hozgarganta que completa la riqueza hidrográfica del municipio.
Jimena de la Frontera pertenece a la Mancomunidad de municipios del Campo de Gibraltar que está formada por el municipio de Algeciras, La Línea de la Concepción, Los Barrios, San Roque, Tarifa, Castellar de la Frontera y Jimena de la Frontera.

I-HISTORIA DE JIMENA DE LA FRONTERA.

Las diferentes etapas son las siguientes:

-Prehistoria.

Hay testimonios de la presencia humana en el lugar por la existencia de diferentes cuevas y abrigos naturales donde dejo el hombre prehistórico sus pinturas rupestres.
Entre estas destaca la Cueva de la Laja Alta donde dejaron escenas marítimas (arte protohistórico) con las decenas de barcos en alusión a los colonizadores del Mediterráneo.
Se relaciona Jimena de la Frontera con Oba, mítica ciudad fenicia que era conocida por sus acuñaciones de moneda. Como testimonios, en el Castillo de Jimena aparecen epígrafes donde aparece la inscripción “res pública Obensis” de la época romana.
-Edad Antigua.
Jimena fue un centro comercial estratégico, por su situación geográfica cercana al Estrecho de Gibraltar y se mantuvo una suma importancia durante la civilización romana.
-Edad Media.
Tras la invasión del Imperio Romano en el 476 d. C se convirtió en un puesto defensivo de vigilancia del Estrecho para los visigodos, que posteriormente sería conquistado por el Imperio bizantino durante la época de Justiniano I en el siglo VI.
Tras la presencia musulmana en Hispania, los conquistadores realizaron una serie de actuaciones para reforzar el baluarte denominado Xemina, vocablo de donde se deriva el nombre cristiano de Ximena y después Jimena, añadiéndoles una nueva fortificación.
Durante el reinado del rey de Castilla y León Fernando IV El Emplazado estuvo en poder de los Benimerines, aliados del reino nazarí de Granada pero después en 1319 el rey Ismail I se lo cedió junto a otros enclaves al reino nazarí de Granada a cambio de la ayuda frente a los reinos cristianos.
Jimena permaneció en poder del reino nazarí de Granada hasta el 1431 adaptando el vocablo de “la Frontera” hasta que en la fecha citada fue conquistada por Pedro García de Herrera, Mariscal de Castilla, bajo el reinado de Juan II de Castilla y León quien tomó la villa el 11 de marzo.
Debido a su posición fronteriza entre ambos reinos de Castilla y Granada, no fue estable cayendo en algunos períodos en poder de los granadinos y otras veces de los castellanos, durante el desarrollo del siglo XV.
En el 1451 cayó en poder nazarí hasta el 1456 donde el rey castellano Enrique IV El Impotente la conquista definitivamente cediéndolo a su valido Beltrán de la Cueva, iniciándose la repoblación y la reedificación de la villa durante el último tercio del siglo XV.
En 1310 la villa pasaría a formar parte del Ducado de Medina Sidonia, siendo vendido por sus anteriores dueños a los Duques de Alburquerque.
-Edad Moderna.
Durante la Guerra de Granada, participaron en la toma de la ciudad de Granada al mando de Rodrigo Ponce de León y los Reyes Católicos le otorgaron el título de “Lealtad” en 1493 y posteriormente en 1498 el Fuero Real.
Tras la recuperación del reino de Granada por los Reyes Católicos, se coloniza el territorio de Jimena con inmigrantes de la Sierra Norte de Huelva.
Debido a razones de inseguridad de las zonas periféricas obligaba a sus habitantes a instalarse en las zonas altas, bajo la protección de las murallas.
Conseguida la estabilidad durante el siglo XVI hace que la población se desplace a zonas menos abruptas, franqueando las vías de acceso a la fortaleza. Así surgieron las calles de Jimena de la Frontera como La Loba, Cantón de la Palma o Cruz del Rincón y con el límite de zonas inestables, la ciudad se extiende en dirección norte, y a finales del siglo XVI en un ensanche del suelo útil para construir se levanta la Iglesia y Convento de Nuestra Señora de la Victoria sobre la Ermita de Santa Ana. Así se configura el Barrio Alto con el trazado de calles independientes de las antiguas que seguían los caminos y calzadas existentes.
Allí se levantan nuevas edificaciones palaciegas en la calle San Sebastián y la calle Sevilla y debido a lo abrupto de la orografía obliga a que los niveles de edificación sean elevados, llegando a veces hasta cuatro plantas en los patios traseros.
Para por su singularidad del paisaje urbano Jimena de la Frontera fue declarada Conjunto Histórico Artístico en el año 1931.
La consolidación de la paz repercute en la vílla y su condición defensiva como enclave militar se transforma en beneficio de otras actividades como la agricultura respecto a cereales y legumbres y sus actividades ganaderas, especialmente la vacuna y también la explotación de los bosques que reportan muchos beneficios al Ducado de Medina Sidonia. Debido a estos motivos, aumentó demográficamente la población instalándose a extramuros del conjunto amurallado.
En el siglo XVII se inicia los conflictos con el Duque de Medina Sidonia para obtener la libertad del sistema señorial pero no se consigue resultado alguno.
La pérdida de Gibraltar en la Guerra de Sucesión en el siglo XVIII transforma a Jimena en un enclave militar en lucha contra los ingleses.
Felipe V le otorgará en 1717 el título de “Fiel” por su actitud en la Guerra de Sucesión española.
A fines del siglo XVIII se construye un segundo alto Horno andaluz en las orillas del río Hozgarganta por las necesidades bélicas de la zona y la empresa mantuvo estas circunstancias pero el alto costo y los sitios Gibraltar acabaron con su existencia.