La
iglesia de la Inmaculada es un templo de reducidas dimensiones -del que no se sabe nada de su construcción ni en que fecha se hizo- y, aunque en su
fachada aparece la cifra de 1887, esta no puede ser la de su fundación, pues en la visita pastoral del Obispo D. Jaime Catalá y Barbosa, del 26 de Mayo de 1880, esta iglesia figura como
capilla.
La creación de esta capilla se debe situar entre 1822 y el referido 1880.