Se trata, sin duda, de uno de los
pueblos más singulares de
España. Su entramado urbano está declarado Conjunto Histórico. Y es que a través de una elevada pendiente, el
caserío baja desde el
castillo adaptándose al curso del
río, lo que le confiere una singular disposición con diferentes niveles de altura. El castillo es de origen árabe. La
iglesia,
gótica. El
Ayuntamiento, por su parte, alcanza el estilo mudéjar. La fortaleza nazarí está formada por unas 40
torres y unos 530 metros de
muralla. Merece la pena darse un garbeo por la zona.