Hasta la última década, las mujeres de Vejer llevaban capas largas y oscuras que velaron sus rostros como los hábitos de monjas. Aunque esta
costumbre está prácticamente extinguida, el pasado morisco de
Vejer de la Frontera aún se puede apreciar. Desde la
carretera A2229 se asciende poco a poco hasta llegar a unos 200 metros de altura y allí se encuentra, sobre un cerro y a orillas del
río Barbate, la hermosa y pintoresca ciudad de Vejer de la Frontera en la costa de la provincia de
Cádiz. Hasta aquí hemos venido llamados por la Semana
Medieval organizada por su
ayuntamiento y con la colaboración de la Fundación Tres Culturas. Una vez alojados fuimos hasta la
Casa de la Cultura donde nos recibió con amabilidad Juan Jesús Cantillo, el arqueólogo de Vejer, quien no dio toda la
información necesaria para poder asistir a los eventos culturales.