Fuele de mucho gusto al Duque la relación, y el modo con que la buena vieja la hizo; porque diciendo, que el Marques, u los suyos habían comido aquella carne de
toro assada, añadía ella: No como vos ahora señor Duque, que comeís buenas gallinas; y diciendo, que habían sesteado sobre las adargas, decía: No como ahora señor Duque, que vos dormis entre sabanas de Olanda. Lo cual no solo llevaba mal con el Duque, más antes admiraba la excelente virtud de su bisabuelo, y de aquellos Cavalleros, que le acompañaban: y yo juntamente en esta acción reconozco la viva imitación de los Héroes, que introduze Homero en su Ilíada, donde jamás representa combite demás, que carne asada,
pan y vino y en la Odisea, significando los muchos regalos, que la Ninfa Calipso hazia Vlisses, dice, que le daba pan blanco y vino tinto.