El
castillo fue una importante fortaleza
militar cuya construcción se remonta a la dominación musulmana, aunque sin negar la existencia de una fortificación desde la epoca prerromana. Es propiedad privada del marqués de la Motilla pero se puede visitar, encontrandose perfectamente reconstruido. La superficie de la fortaleza supera los 5.600 metros cuadrados, incluida la evolvente barbacana, tras la que surgen sucesivamente, de este a oeste, las
torres Pequeña, del Moro, Cuadrada, Redonda, de la
Escuela, de la Escucha y de las
Campanas. Pero la más importante es la del
Homenaje, que eleva sus treinta metros de sillares junto a la acantilada vertiente sudeste del pedestal roquero. La cámara del piso superior, de planta cuadrada, posee una bella cubierta abovedada de disposición octogonal.