La casa de su derecha fue depósito de medicinas en tiempos del médico don Bartolomé Blanco. Pero nunca fue botica en el sentido estricto de farmacia, que, por otro lado, no podía ser legalmente. Sí era legal el estanco que estaba en la casa siguinete inferir atendido por Manuel Lorenzo hasta su fallecimiento en que pasó a sus sobrinas las del comercio.