¿Recuerdas la batalla final en el Peñasco Gordo? Sólo se trataba de romper la espada del contrario, una que tú recuerdas bien era de encina y la otra de acebuche. No se rompió ninguna de las dos y la lucha quedó en tablas con dos personas exhaustas, cuyos nombres no voy a decir por razones que tú y yo conocemos sobradamente. Un saludo. RKC.