Esto es una pequeña muestra de como se pretende triunfar, sin importar el como ni el porqué. Es sólo dos pinceladas de como se las gastan los poderosos y sin escrupulos.
No quito ni pongo rey ni sirvo a ningún señor, sólo copio y pego lo que otros escriben
El articulo completo se puede leer en El Pais Digital
La sorprendente respuesta del club blanco fue acuñar un discurso plañidero. Mourinho se presentó como el Robin Hood del fútbol español sin reparar en que nunca se le tendrá por el justiciero de los pobres, sino por el valido de los ricos que aspiran a recuperar el trono. Ya pasó en el Oporto y el Inter y, de alguna manera, situó al acaudalado Chelsea en la senda del Manchester United. Ahora aspira a destronar al Barça y coronar al Madrid de Florentino, necesitado de un éxito inmediato. No extraña, por tanto, que el presidente del Madrid haya unido su destino al del entrenador desde que redefinió "el señorío".
A ojos del barcelonismo, el señorío era el esfuerzo que hacía el club para procurar que el equipo compitiera en las mejores condiciones, tarea en la que directivos como Saporta y Bernabéu fueron inigualables y que se supone ha pasado a manos del Barça porque Roures controla la televisión, Villar es antimadridista y Europa ya no necesita al Madrid. Ahora, el señorío es también, y en palabras de Florentino, "denunciar aquellos comportamientos irregulares", afirmación sorprendente en un todopoderoso.
No quito ni pongo rey ni sirvo a ningún señor, sólo copio y pego lo que otros escriben
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La sorprendente respuesta del club blanco fue acuñar un discurso plañidero. Mourinho se presentó como el Robin Hood del fútbol español sin reparar en que nunca se le tendrá por el justiciero de los pobres, sino por el valido de los ricos que aspiran a recuperar el trono. Ya pasó en el Oporto y el Inter y, de alguna manera, situó al acaudalado Chelsea en la senda del Manchester United. Ahora aspira a destronar al Barça y coronar al Madrid de Florentino, necesitado de un éxito inmediato. No extraña, por tanto, que el presidente del Madrid haya unido su destino al del entrenador desde que redefinió "el señorío".
A ojos del barcelonismo, el señorío era el esfuerzo que hacía el club para procurar que el equipo compitiera en las mejores condiciones, tarea en la que directivos como Saporta y Bernabéu fueron inigualables y que se supone ha pasado a manos del Barça porque Roures controla la televisión, Villar es antimadridista y Europa ya no necesita al Madrid. Ahora, el señorío es también, y en palabras de Florentino, "denunciar aquellos comportamientos irregulares", afirmación sorprendente en un todopoderoso.