En el solar de
Espejo se asentó, durante las épocas ibero-turdetana y
romana, la ciudad de Ucubi de gran importancia debido a su emplazamiento estratégico. Llegó a ser una colonia romana, de las más importantes de la Bética. Contó con una importante
muralla, un
teatro y probablemente un anfiteatro. Además, de ello, el suministro de
agua fue de suma importancia, contando con de las redes hidráulicas más importantes que se han encontrado en la Bética. No podemos pasar por alto que la
familia paterna del emperador Marco Aurelio (uno de los 4 grandes emperadores
romanos) era originaria del municipio, y de igual manera, durante las guerras civiles, Ucubi jugó un importante papel al posicionarse junto al bando cesariano.
Recientemente se ha tenido conocimiento de la existencia de una recinto fortificado, ubicado en el Cerro de la Pontanilla. El abastecimiento hidráulico de la colonia se lograba mediante un
acueducto cuyos vestigios se localizan en terrenos de
Nueva Carteya,
Castro del Río y Espejo. También se localizan numerosas cisternas o depósitos en algunos puntos de la actual ciudad. Mencionar la contrucción romana en sillería de El Aljibe de carácter cultual a poco más de un kilómetro de Espejo.
La población ibera asentada en estas tierras con el nombre de Uccubi fue ocupada por los romanos que le cambiaron el nombre por el de Attubi. Desde el siglo XVI, los arqueólogos vienen interesándose por tan glorioso pasado
romano a partir de las inscripciones descubiertas en su término. Durante la batalla de Munda entre Julio César y Pompeyo prestó su apoyo a César que lo recompensó haciéndolo colonia inmune. En la dominación árabe se llamó Al Calat. Pero fue Fernando IV quien dio a la villa el nombre de Espejo, derivado del vocablo latino specula, que significa atalaya y que alude a su privilegiada situación.
En 1303, Fernando IV le concede el privilegio de repoblación de aquel lugar, que por voluntad real pasará a denominarse Espejo:
... y porque el su
castillo a que solían decir Alcala a quien nos tovimos por bien mudar el nombre y quel digan Espejo
Este nombre no es más que una mala traducción del latín de Specula, que, como Alcalá, significa fortaleza o castillo.