Los que me conoceis ya sabeis que yo no soy muy
amiga de los
pasteles, pero ultimamente he aprendido a hacer unas
tartas preciosas. Vereis son preciosas porque están muy decoradas y dicen que también muy buenas, pero yo, no soy golosa. pero prometo que el año que viene me acuerdo del 23 de abril y yo le hago una
tarta a Mari Carmen, aunque sea para que nos la merendillemos virtualmente.