Yo nunca he escrito ningún poema de amor.
Aunque siempre he estado enamorada. ¡Oye! ¿Qué cosa más raraaaa....?
será porque no soy tan romántica cómo Becquer. Es que ese muchacho era un poquillo complicao en su forma de ser propiamente dicha.
¡Un hombre del siglo de las luces, claro está de los que no habian tenido problemas para ganarse el
pan!
O mejor dicho, de los que aparentaban
comer... ¡Esta
España de las apariencias, qué cosas más raras!