El de Pelagio estaba a la izquierda, según enfilamos la calle Larga. Me acuerdo de Pelagio, tenía la cara redondonda y sonrosada, era un poquito rellenito y muy buena persona, entonces era jovencito.
Al lado de su comercio había una carpinteria que hacian cajas de muertos. ¡Perdonen ustedes ataudes!
Al lado de su comercio había una carpinteria que hacian cajas de muertos. ¡Perdonen ustedes ataudes!