La puerta la dejo cerrada, pues fuera hace bastante frío. Quienes quieran entrar, podéis llamar, que seguro estoy de que alguien os puede abrir.
Un abrazo y hasta la tarde.
** En la puerta de tu casa
una mañana, yo te esperaba.
Salió tu padre por ella
y de allí, me hecho a patadas. **
Cierro mi ventana, me voy a dormir.
Feliz descanso para todos.
¡Buenas noches nos dé Dios y hasta mañana si dios quiere!
Cierro mi ventana, me voy a dormir. Feliz descanso para todos.
** Si llamo a la puerta, cierras,
si estás al balcón, te escondes
qué te ha hecho mi corazón.
Que tan mal le correspondes.**
** Si llamo a la puerta, cierras,
si estás al balcón, te escondes
qué te ha hecho mi corazón.
Que tan mal le correspondes.**
Como Rafy se marchó de Romería, aquí nadie se acuerda de abrir la puerta.
En estos momentos ya queda abierta. ¡Adelante estan ustedes en su casa!
Muy buenos días para tod@s y a disfrutar de este Sábado.
¡Toc... toc... toc...! ¿Se puede pasar, dan ustedes su permiso?
Muy buenos días tengan tod@s ustedes.
Dejo la puerta abierta, para todos los que quieran entrar.
Hasta luego.
Buenas tardes como veo la puerta entreabierta pues empujo y entro hasta la puerta el corral.
Muy buenos días tengan tod@s ustedes.
Dejo la puerta abierta, para todos los que quieran entrar.
Hasta luego.
Julio, para mi son tardes. Aqui, el toque lo dan muy temprano.
Un abrazo, espero que tengas un buen día.
Muy buenos días tengan tod@s ustedes.
Dejo la puerta abierta, para todos los que quieran entrar.
Hasta luego.
** ¡No me molestes! La puerta está cerrada y mis hijos y yo estamos acostados**
Un día Jaimito está intentando llamar al timbre de una puerta, pero no llega porque está demasiado alto, asi que un señor que lo ve desde la calle, se acerca y le dice.
- Chico ¿quieres que te eche una mano?
- Sí, por favor.
El hombre coge en brazos a Jaimito y después de llamar, le pregunta.
- ¿Que hacemos ahora?
- ¡Correr!
eso me suena, ¿quien no lo hizo alguna vez?
Un día Jaimito está intentando llamar al timbre de una puerta, pero no llega porque está demasiado alto, asi que un señor que lo ve desde la calle, se acerca y le dice.
- Chico ¿quieres que te eche una mano?
- Sí, por favor.
El hombre coge en brazos a Jaimito y después de llamar, le pregunta.
- ¿Que hacemos ahora?
- ¡Correr!
Bueno que me voy, pero por poco rato. Me han puesto aquí en la esquina unas oportunidades del Corte de la mi lady y voy a ver si pesco algo oportuno.
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