A mi padre le asignaron uno, recuerdo haber ido con él muchas veces allí, tenía unos manzanos que daban unas manzanitas verdes y chiquininas que estaban buenísimas. No sé cuando lo dejó o que habrá pasado con el huerto. Amí este chabarcón me dá miedo con solo mirarlo y eso que yo no le temo mucho al agua, pero esta me impresiona. Cuando se hizo éste chabarcón se hicieron unas parcelas para los que no tenían nada y pudieran tener su propio huerto, pero la vida se hizo imposible y vino la emigración y con ella la mejor forma de vivir para los que se fueron y también para los que quedaron. posiblemente no haya nada de huertos de esos. como lo sabes y nos criamos sanos y fuertes que hoy todo parece malo y no saben ná de estas cosas los niños ni subirse a un arbol. Jajajaja... que recuerdos más bonitos, esa es nuestra tierra la vida que empezamos tan sana.