Mucha gente, pero no veo a nadie conocido. Me marcho por la Corredera. Visto y comprobado que nadie me vá a informar sobre si llueve o sale el Sol por mi Hinojosa y dado que aunque ignoréis mi petición, no me voy a enfadar por eso. Os voy a poner una anecdota que le ocurrió a mi vecina Consolación, para echar un ratito a la hora del aperitivo. ¡Oh noche que guiaste!
¡Oh noche amable más que la alborada:
oh noche que juntaste
Amado con Amada.
Amada en el Amado transformada Andaaaaaaaaaaa esta sigue verde. Pues que alguien nos cuente el fin de semana que ha sido la ruta de la tapa, aunque hambre vamos a pasar.
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