Aquí yace el perezoso
que al acabar la jornada
dijo: Voy a ser dichoso;
ya no tendré que hacer nada. Cuando hacés así, los bíceps se te inflan y los tríceps se te aflojan. Cuando hacés al revés, es al revés. Vicen, esta tarde me han dado recuerdos para ti.
Me he ido al Corte Inglés a premiarme y he estado un ratito charlando con Bernardita. Nidos, los nidos que tenemos en el pueblo, son muchos...