Mi amigo Olegario es un poquillo... digamos como los que se vendian en la feria..
Un día fue al oftalmólogo. El señor oculista coloca a Olegario a cuatro metros de una pizarra luminosa con símbolos y letras y le dice..
Tapese el ojo derecho con la mano. ¿que letras son estas? y Olegario se las dice perfectamente.
Ahora el ojo izquierdo.
Olegario lee perfectamente las letras y reconoce todos los dibujos.
¡Muy bién! ahora con los dos. El médico señala las letras y nada, siléncio total, Olegario no dice nada. Señala nuevamente las más grandes y Olegario nada.
De pronto el médico se vuelve y mira a mi amigo.. Olegario se había tapado los dos ojos.. ¡Anda qué, así vá el personal!
Un día fue al oftalmólogo. El señor oculista coloca a Olegario a cuatro metros de una pizarra luminosa con símbolos y letras y le dice..
Tapese el ojo derecho con la mano. ¿que letras son estas? y Olegario se las dice perfectamente.
Ahora el ojo izquierdo.
Olegario lee perfectamente las letras y reconoce todos los dibujos.
¡Muy bién! ahora con los dos. El médico señala las letras y nada, siléncio total, Olegario no dice nada. Señala nuevamente las más grandes y Olegario nada.
De pronto el médico se vuelve y mira a mi amigo.. Olegario se había tapado los dos ojos.. ¡Anda qué, así vá el personal!