Juan mi mario y yo nos damos largas caminatas por el Paseo Marítimo y así se abre el apetito...
¿Y a Juan Antonio no le sube la tensión del ojo?
Nó si los ojos él los tiene bién... mira mu bién to lo que pasa... y yo na más que hago señalarle a las gordas y feas, pa que compare y así me siento más tiposa. ¡Bueno que la brisa del mar es mu beneficiosa y ya está!