Anoche me acosté acojonado, pensando en que te pueden coger una glándula gónada entre dos planchas. Eso tiene que ser... como un martirio chino con muy mala uva y encima que sea una enfermera que te tenga coraje ó tú le hallas formado alguna y te tenga a su disposición. HORRIBLE.
Esta siesta tampoco duermo.
Esta siesta tampoco duermo.