Me acuerdo yo de una semana santa hace ya muchos años que me nos dejaron ir de excursión mis padres a mi hermana Puri, con su novio y a mí, naturamente y además ibamos en un autocar con mucha más gente. Fuimos a Cadiz y Sevilla y cayó una manta agua... ¡ay cuanta agua! pero nosotros ni nos mojabamos, decíamos, deja, qué llueva, que llueva, para una vez que nos han dejado ir de excursión, dá lo mismo.... Pués eso, lo mismo digo, si me pilla en Hinojosa el aguacero, yo tan contenta. Pero.. ¡Qué pena de que las cofradias no se puedan lucir por nuestras calles, con esos pasos y esas imágines que tenemos en Hinojosa!