Y ese muchacho que viene templanito por la mañana de vuelta de la feria y despierta a su mama que está la pobre dormia y le dice..... Mamá, mamá, ¿Puedo tirarme a la bartola en el sofás? y le contesta su madre, si hijo pero no lo estropees y ten cuidado..... Ese muchacho que se asoma a la puerta de la calle y dice... Bartola entra que mi madre nos deja.