Las clases eran mañanas y tardes. La únicas tardes que no había eran jueves y sábados. Salíamos por las tardes al "campo grande" a jugar al fútbol, si estabas en la lista de 22 tenías la suerte de jugar en el campo de fútbol principal, se formaban 2 equipos donde nunca faltaban mezclados entre nosotros el padre Miguel y el padre Moisés (ahora lo he recordado, antes se me pasó enumerarlo). Los demás tocaba jugar partidillos informales o simplemente correr por los alrededores.