Las palabras son como una llave. Capaces de abrir cualquier puerta.
Las llaves abren puertas, pero también las cierran como las palabras.
Y una sonrisa es la llave secreta que abre muchos corazones.
Una sonrisa no cuesta nada y produce mucho, enriquece a quienes la reciben sin empobrecer a quienes la dan.
No dura más que un instante pero su recuerdo es a veces eterno.