Querida María José: tunota la he le ido con bastante ha tención y la verdad que tú sin querer me apuesto los dientes muy largos pero que muy largos, pues me has nombrado que ya en pesáis ha comer algunos pajaritos y algunos zorzales, pues en ese momento me avenido a la me moría la cantidades que otro chico y yo coguiamos en las minas del Cerro el Vidrio. Pues entre los dos teníamos una paranza que habría unos trescientos Lasso de pie, bueno cambió de pensamiento y paso ha decirte que me ha legro ... (ver texto completo)