MONTORO: FUE AQUEL DÍA...

FUE AQUEL DÍA

¡Oh Montoro! Balcón de Andalucía
con tus calles angostas y sombrías
en ti dejé mi amor. mis alegrías
mis pasiones y mi melancolía.

Recuerdo el día de Santa Lucía,
viendo dejar atrás el tren las vías
y que por encanto desaparecías
arrastrando tras de sí el alma mía.

¡Cuánto te añoro Montoro de mi alma!
Desde esta ciudad de cemento y hastío,
sin casino con botijo que me calma

la sed que me produce ese vacío,
por no tener una silla y una cama
aunque fuese en una aceña del río.