Julio, siempre se recordarà el estanque como la avenida del pellizcòn. Tenìa su salero en años pasados. Ahora parece que pierde todo su encanto, y sus ratos de pasèo en las noches veraniegas.
Amigo Pablo; En mis años "aquellos" yo no le llamaría avenida del "pellizcón" más bien le llamaría Avenida del "Agarron".
A lo largo de toda la carrtera había unos bancos de hormigón pintados de blanco (en la actualidad, no se si estan). Estaban separados unos del otro apróximadamente (+-) 1,50 m. y llegaban desde el paso a nivel hasta el
pozo de la voluntad, justo donde había otro pequeño estanque. Pués una manera de entretenernos, era: saltando de un banco a otro desde el paso a nivel hasta el
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