Querido amigo gordo. Bien recivido eres. Aunque no me conozcas persolalmente, pregunta por pablo el hijo del moñino, pues no te faltarà de nada. Con todo cariño.
¿No serás Lorenzo Sierra Dueñas?
Si amigo Ignacio, si que soy Lorenzo y de vez en cuando me acuerdo de los ratos (unos buenos y otros no tanto) que pasabamos cuando eramos unos crios.