Prehistoria.
No se han encontrado pruebas que demuestren que en el actual término de Villaviciosa hubiese asentamientos humanos durante esta época. No obstante, esto no supone que estuviese totalmente despoblado. Unos restos de pedernales encontrados en La Grijuela y en las cercanías del
río Cebrilla junto a la aparición de un resto de núcleo, realizado de sílex blancuzco procedente de las proximidades del río Névalo y sin que podamos datar con un mínimo de seguridad a qué época de la Prehistoria pertenecen refuerza esta teoría.
Edad Antigua.
La romanización de la península supuso para el territorio de Villaviciosa una fuerte explotación minera, sobre todo en cuanto a cobre y plomo se refiere. Por todo el término se encuentran restos de antiguas extracciones mediante
pozos o profundas zanjas. También llegó a tener gran importancia la obtención de plata del Cerro de la Plata, que tuvo incluso mayor actividad en época califal. Los restos de presencia humana, fuera del contexto puramente minero, se concretan en una necrópolis visigoda en las cercanías del actual núcleo urbano.
Edad Media.
El término de Villaviciosa está enclavado en una de las variantes del
camino que unía las ciudades de
Córdoba y Mérida durante la época musulmana. Al poco tiempo de ser reconquistada la capital de la provincia, el territorio quedó incorporado a
Espiel y puesto bajo el control del consejo cordobés en el año 1237 al donar Fernando III a la ciudad las fortalezas de Cuzna, Névalo, Espiel y
El Vacar. Fue aproximadamente en el paso del siglo XV al XVI cuando se gesta el embrion del actual núcleo al llegar a estas tierras una imagen de la
Virgen y la construcción de un
santuario para su culto.
Edad Moderna.
Durante esta época, y en torno al santuario de la Virgen, se va desarrollando el asentamiento que hoy conocemos por Villaviciosa. En principio, los lugareños, que hasta entonces vivían en cortijos y aldeas se van congregando en el nuevo núcleo animados por la devoción que le tienen a la imagen. Estas primeras inmigraciones se ven completadas con otras de vecinos de Espiel y la comarca de los Pedroches.
Esta circunstancia hace que sean solicitadas al consejo espeleño - bajo cuya tutela se encuentra todavía el
pueblo - diversas licencias para construir una
casa y cortar la madera necesaria para su realización. Estos colonos trabajan la tierra si tener la propiedad de la misma y no es hasta 1741, tras pagar el valor de las parcelas, cuando éstas pasaron a manos de los mismos. También en esta centuria se creó la
parroquia de
San José y funcionaba un
granero dependiente del pósito espeleño. En el año 1775, Carlos III concede a Villaviciosa el privilegio de villazgo, circunstancia ésta que supone la independencia municipal de Espiel.
Edad Contemporánea.
El comienzo del siglo XIX es, como en el resto de la península, bastante agitado en el recién nacido municipio. La guerra de la Independencia, las represiones absolutistas y el bandolerismo privan al pueblo de tiempos más tranquilos. La cercanía de Córdoba hace que los sucesivos movimientos obreros que a lo largo del tiempo van apareciendo hagan mella en la población.
Villaviciosa -y ya en el siglo XX- se encuentra en la zona republicana al comienzo de la Guerra Civil. Una furiosa represión hacia los hacendados y el clero y la puesta en práctica del anarcosindicalismo transforma y marca este periodo de su
historia.
El nombre de Villaviciosa procede de la advocación de la imagen de Nuestra Señora de Villaviciosa que se venera en la localidad.
Cuenta la
tradición que fue traída por un vaquero portugués de Vila-Viçosa. El emplazamiento de la población está determinado por la ubicación de la
ermita de la Virgen de Villaviciosa, en el centro del actual casco urbano y la ubicación de la ermita está a su vez determinada por el cruce de dos
caminos muy importantes. Por un lado el camino del Pretorio, una variante del camino de Córdoba a
Extremadura y por otro el camino de
Madrid-
Toledo a
Sevilla-
Cádiz pasando por Los Pedroches.
El asentamiento urbano adquiere importancia como aldea a finales del siglo XVII. El crecimiento demográfico de la centuria siguiente favoreció el rápido aumento de la población.
VILLAVICIOSA: v. con ayunt. en la prov., part. jud. y dióc. de Córdoba (6 leg.), aud. terr. y c. g. de. Sevilla (22); SIT. en una hondonada; vientos N. y S.; el CLIMA es sano, y propenso a calenturas remitentes e intermitentes. Tiene 450
CASAS; la consistorial que es de bastante capacidad y de buena construcción, la cárcel y el pósito;
escuela de primeras letras con la dotación de 1,460 rs. anuales concurrida por unos 100 alumnos; otra para niñas a la que asisten 30 discípulas; igl. parr. (San José) servida por un cura vicario, una ermita en la
plaza con el título de Ntra. Sra. de Villaviciosa con capellán nombrado por el diocesano;
cementerio en paraje ventilado, y por ultimo dos abundantes
fuentes en los afueras, de cuyas buenas
aguas se surte el vecindario. Confina el TÉRM. N. y E, Espiel; S. Posadas, y O. Córdoba. El TERRENO es de ínfima calidad, estando todo él poblado de
monte bajo y de algunos
pinos y chaparros, como uno de los sitios más ásperos de
Sierra Morena: lo baña el r. Guadiato que nace en el part. jud. de
Fuente Ovejuna. Los CAMINOS son locales pasando también por su jurisd. el de herradura de los Pedroches a Sevilla: la CORRESPONDENCIA la recibe de Córdoba por balijero. PROD.: trigo, cebada, centeno, avena, miel y mucho vino, que es en lo que consiste su principal riqueza; cría
ganado vacuno y cabrío;
caza mayor y menor, y
pesca de anguilas. IND.: la agrícola, varios telares de lienzo, 7 alambiques de aguardiente, 6
molinos harineros y 2 alfarerías.
COMERCIO: extracción de vino y aguardiente, e importación de algún aceite. POBL. 400 vec., 1,600 alm. CONTR.: 52,016 rs. 12 mrs. RIQUEZA IMP.: (V. el art. part. jud.). El PRESUPUESTO MUNICIPAL asciende a 17,000 rs. que se cubren con el producto de las
fincas de propios, y el déficit por reparto vecinal.
* Diccionario geográfico – estadístico - histórico de
España y sus posesiones de Ultramar. Pascual Madoz, 1845.