Por tanto, nos encontramos en uno de los pueblos donde la gente tiene como principal medio de subsistencia la explotación del olivar en sus minifundios agrícolas, en un lugar donde no existen los grandes propietarios. Esta serie de factores hacen que Algarinejo sea el lugar idóneo para pasar largas jornadas de tranquilidad y sosiego, recordando sus paisajes y sus gentes a antiguos cuadros del pasado, por algunos añorados.
Todo el municipio, por su situación geográfica y su modo de vida, reúne grandes cualidades para el desarrollo de un turismo de interior, rural y sostenido. Podemos encontrar como ya hemos dicho un panorama semejante al que vivían nuestros abuelos, en algunas zonas rurales, donde todavía se pueden observar actividades artesanales de autosuficiencia como la industria familiar quesera, las conservas y salazones...; manufacturas como la albardonería, el trabajo en mimbre, esparto o encajes y mantillas...; en cuanto a las numerosas fiestas, el visitante se sorprenderá de las romerías, funciones y ferias del municipio y de los alrededores, donde la diversión mezclada con las tradiciones populares está garantizada.
Todo el municipio, por su situación geográfica y su modo de vida, reúne grandes cualidades para el desarrollo de un turismo de interior, rural y sostenido. Podemos encontrar como ya hemos dicho un panorama semejante al que vivían nuestros abuelos, en algunas zonas rurales, donde todavía se pueden observar actividades artesanales de autosuficiencia como la industria familiar quesera, las conservas y salazones...; manufacturas como la albardonería, el trabajo en mimbre, esparto o encajes y mantillas...; en cuanto a las numerosas fiestas, el visitante se sorprenderá de las romerías, funciones y ferias del municipio y de los alrededores, donde la diversión mezclada con las tradiciones populares está garantizada.