Edificio de los siglos XVI-XVII, situado en la parte antigua de la localidad, que sirvió en un principio como fábrica de paños, pero que consagró su uso a la destilería de licores y a la producción de vinos. Debemos destacar que Algarinejo, en el siglo XVIII, tenía una importante actividad industrial. Su estado es de abandono, pero se conserva en buenas condiciones, destacando los sillares con los que está construida. También de sillares, dispone de una bonita portada, que da entrada al recinto, con arco de medio punto.
Cascada de la Viña
A unos 12 Km. de Algarinejo encontramos el anejo de la Viña. En él podemos destacar una gran cascada, situada en la parte baja del pueblo, donde salta un gran chorro de agua, todo ello rodeado por un bello paisaje verde y brillante.
A unos 12 Km. de Algarinejo encontramos el anejo de la Viña. En él podemos destacar una gran cascada, situada en la parte baja del pueblo, donde salta un gran chorro de agua, todo ello rodeado por un bello paisaje verde y brillante.
Iglesia Santa María la Mayor
Iglesia “Santa María la Mayor”, edificada en 1779, bajo un proyecto del gran arquitecto neoclásico Ventura Rodríguez. La Iglesia posee unas proporciones desorbitadas para el número de habitantes que la población tenía en la fecha en que se construyó el edificio.
El edificio debe su gran tamaño por ser el resultado del cumplimiento de una promesa que hizo el 5º marqués de Algarinejo, Don Francisco de Paula Fernández De Córdoba, según consta en un lienzo que pende en el Sagrario de la Iglesia Parroquial de Algarinejo. La leyenda cuenta que se hallaba el 5º Marqués de Algarinejo, cuando le acometió una enfermedad de la cual estuvo apunto de morir, y en su apuro se encomendó a Nuestro Padre Jesús de Algarinejo, ofreciéndole si sanaba erigirle en la Villa una iglesia todo lo mejor que él pudiera. Como alcanzó la curación y seguidamente pasó a cumplir su promesa, se volcaron las cuantiosas rentas del Marqués en la obra del nuevo templo y de ahí su magnitud porque por entonces los Marqueses de Algarinejo poseían la mayor fortuna de todos los Nobles No Grandes de España. Se dice que tardó su edificación unos 14 años y medio.
La Iglesia posee las características propias de un edificio neoclásico, por su austeridad, simetría y ausencia de motivos decorativos. Consta de tres naves, en las que sobresale la central por su mayor altura y anchura, con sus correspondientes capillas y gran torre. La nave central es de cruz latina con cúpula de medio cañón rebajada sobre el crucero. Las naves laterales cuentan con varias capillas, separadas por pilares cruciformes los cuales sustentan grandes arcos de medio punto y una gran cúpula central realizada con ladrillo.
La capilla mayor es cuadrada con arco triunfal de medio punto y bóveda de medio cañón. A ambos lados de ésta se abre la sacristía y la capilla del Nazareno.
Posee tres portadas, la principal a sus pies y dos laterales. Están realizadas en piedra de cantería. La portada principal mira al Sur y se sube por dos graderías. Esta portada es adintelada y posee un frontón semicircular.
La Iglesia fue recubierta en su interior por una capa de yeso sin saber su causa. Se cree que pudo ser por problemas de epidemias. Así permaneció hasta que hacia 1980, se proyectó volverla a su estado natural y eliminar esa capa de yeso para dejar visible los sillares que la componen.
Iglesia “Santa María la Mayor”, edificada en 1779, bajo un proyecto del gran arquitecto neoclásico Ventura Rodríguez. La Iglesia posee unas proporciones desorbitadas para el número de habitantes que la población tenía en la fecha en que se construyó el edificio.
El edificio debe su gran tamaño por ser el resultado del cumplimiento de una promesa que hizo el 5º marqués de Algarinejo, Don Francisco de Paula Fernández De Córdoba, según consta en un lienzo que pende en el Sagrario de la Iglesia Parroquial de Algarinejo. La leyenda cuenta que se hallaba el 5º Marqués de Algarinejo, cuando le acometió una enfermedad de la cual estuvo apunto de morir, y en su apuro se encomendó a Nuestro Padre Jesús de Algarinejo, ofreciéndole si sanaba erigirle en la Villa una iglesia todo lo mejor que él pudiera. Como alcanzó la curación y seguidamente pasó a cumplir su promesa, se volcaron las cuantiosas rentas del Marqués en la obra del nuevo templo y de ahí su magnitud porque por entonces los Marqueses de Algarinejo poseían la mayor fortuna de todos los Nobles No Grandes de España. Se dice que tardó su edificación unos 14 años y medio.
La Iglesia posee las características propias de un edificio neoclásico, por su austeridad, simetría y ausencia de motivos decorativos. Consta de tres naves, en las que sobresale la central por su mayor altura y anchura, con sus correspondientes capillas y gran torre. La nave central es de cruz latina con cúpula de medio cañón rebajada sobre el crucero. Las naves laterales cuentan con varias capillas, separadas por pilares cruciformes los cuales sustentan grandes arcos de medio punto y una gran cúpula central realizada con ladrillo.
La capilla mayor es cuadrada con arco triunfal de medio punto y bóveda de medio cañón. A ambos lados de ésta se abre la sacristía y la capilla del Nazareno.
Posee tres portadas, la principal a sus pies y dos laterales. Están realizadas en piedra de cantería. La portada principal mira al Sur y se sube por dos graderías. Esta portada es adintelada y posee un frontón semicircular.
La Iglesia fue recubierta en su interior por una capa de yeso sin saber su causa. Se cree que pudo ser por problemas de epidemias. Así permaneció hasta que hacia 1980, se proyectó volverla a su estado natural y eliminar esa capa de yeso para dejar visible los sillares que la componen.