Felipe, buenas tardes, aqui te traigo una historia que me encontré por ahí.
Espero que te rias un rato. Hasta luego.
DIARIO DE UN DESGRACIADO
(Encontrado bajo unas cajas de cartón en la boca del metro de Sol)
Mi padre era un capullo. Trabajaba en un banco y lo atraparon robando bolígrafos.
Cuando nací, el doctor fue a la sala de espera y le dijo a mi padre: Hicimos lo que pudimos..... pero salió.
Mi madre nunca me dio el pecho porque decía que solo me quería como amigo.
Mi padre lleva en la cartera la foto del niño que ya venía en la cartera cuando la compró en la tienda.
Pronto me di cuenta de que mis padres me odiaban: mis juguetes para la bañera eran una tostadora, un radiocassette, y una batidora.
Una vez me perdí. Le pregunté al policía si creía que íbamos a encontrar a mis padres. Me contestó: No lo se chaval... hay demasiados sitios donde se pueden esconder.
Cuando me secuestraron, los secuestradores mandaron a mi padre uno de mis dedos..... Mi padre dijo que quería mas pruebas.
El último deseo de mi padre moribundo fue que me sentara en su regazo (Estaba en la silla eléctrica).
Trabajé en una tienda de animales... La gente no paraba de preguntarme cuanto iba a crecer.
Después trabajé en el “Tren de la Bruja”. Asustaba a los niños.
Una vez me encontré a las autoridades sanitarias... y me ofrecieron un paquete de cigarrillos.
Un día me llamó una chica a casa diciéndome: - ven a casa, no hay nadie... y cuando llegué a su casa, efectivamente, no había nadie.
A mi mujer le gusta hablar conmigo después de practicar el sexo... El otro día me llamó a casa desde un hotel.
Una vez ingerí un frasco entero de tranquilizantes. El doctor me dijo:“tómese una copa y acuéstese un poco.
El psiquiatra me dijo que me estaba volviendo loco. Yo le dije que quería una segunda opinión. - De acuerdo, también es usted feo.-
Una vez, pensé en el suicidio, me quería tirar desde un décimo piso. Mandaron un cura para ayudarme. Sus palabras de animo fueron:
-.....”Preparados, listos...
Espero que te rias un rato. Hasta luego.
DIARIO DE UN DESGRACIADO
(Encontrado bajo unas cajas de cartón en la boca del metro de Sol)
Mi padre era un capullo. Trabajaba en un banco y lo atraparon robando bolígrafos.
Cuando nací, el doctor fue a la sala de espera y le dijo a mi padre: Hicimos lo que pudimos..... pero salió.
Mi madre nunca me dio el pecho porque decía que solo me quería como amigo.
Mi padre lleva en la cartera la foto del niño que ya venía en la cartera cuando la compró en la tienda.
Pronto me di cuenta de que mis padres me odiaban: mis juguetes para la bañera eran una tostadora, un radiocassette, y una batidora.
Una vez me perdí. Le pregunté al policía si creía que íbamos a encontrar a mis padres. Me contestó: No lo se chaval... hay demasiados sitios donde se pueden esconder.
Cuando me secuestraron, los secuestradores mandaron a mi padre uno de mis dedos..... Mi padre dijo que quería mas pruebas.
El último deseo de mi padre moribundo fue que me sentara en su regazo (Estaba en la silla eléctrica).
Trabajé en una tienda de animales... La gente no paraba de preguntarme cuanto iba a crecer.
Después trabajé en el “Tren de la Bruja”. Asustaba a los niños.
Una vez me encontré a las autoridades sanitarias... y me ofrecieron un paquete de cigarrillos.
Un día me llamó una chica a casa diciéndome: - ven a casa, no hay nadie... y cuando llegué a su casa, efectivamente, no había nadie.
A mi mujer le gusta hablar conmigo después de practicar el sexo... El otro día me llamó a casa desde un hotel.
Una vez ingerí un frasco entero de tranquilizantes. El doctor me dijo:“tómese una copa y acuéstese un poco.
El psiquiatra me dijo que me estaba volviendo loco. Yo le dije que quería una segunda opinión. - De acuerdo, también es usted feo.-
Una vez, pensé en el suicidio, me quería tirar desde un décimo piso. Mandaron un cura para ayudarme. Sus palabras de animo fueron:
-.....”Preparados, listos...